Aunque larga, la Comisión de Investigación del Parlamento de Gasteiz sobre las irregularidades en torno al museo Balenciaga se prevé menos tensa que la relacionada con el Guggenheim. A pesar de que fue ayer mismo cuando se acabó la ronda de comparecencias, el calendario aprieta, por lo que los parlamentarios se reunirán esta mañana intentando acordar las conclusiones de su trabajo.

La última comparecencia fue la de Rolando Pacial, el tercer imputado por la Fiscalía junto al ex alcalde de Gernika y ex gerente de la sociedad Berroeta Aldamar, Mariano Camio, y el autor del proyecto, Julián Argilagos. Parciel fue el intermediario entre Argilagos y la ingeniería Eptisa-Cinsa, que acomete las obras, paralizadas desde casi un año, desde que el arquitecto se trasladó a Miami. Parciel se negó, a la salida de la comisión, a hacer declaraciones, aunque su aportación a la comisión no fue determinante.

Visión de los grupos

Después de que Parciel abandonara la comisión, los diferentes grupos expusieron las lineas de sus conclusiones. La presidenta de la Comisión, Onintza Lasa (EA), expresó que está esperanzada de cara al posible acuerdo que se intentará alcanzar durante el día de hoy. En caso de que no fuera posible, los parlamentarios deberían fijar una nueva reunión, situación que no parece muy factible viendo el calendario de la Cámara y el número de temas a tratar.

La falta de transparencia, el abuso de confianza o la falta de mecanismos de las instituciones públicas son las conclusiones en las que la mayoría de grupos coincidieron. Son cuatro las instituciones implicadas en el proyecto. Por un lado está el Ministerio que, junto al Ayuntamiento de la localidad y patronos privados, forman la Fundación Balenciaga. La institución local, el Gobierno de Lakua y la Diputación de Gipuzkoa integran, asimismo, la sociedad Berroeta-Aldamar, responsable de la construcción.

Los matices a la hora de pedir responsabilidades, por lo tanto, pueden variar a la hora de decidir cuál de las instituciones es más responsable de la falta de mecanismos de control. Parece lógico que el PNV intente dirigir sus críticas al Ministerio ya que las personas implicadas en el resto de instituciones son de su partido. La duda está en si EA repetirá el desmarque respecto a sus socios de gobierno que llevó a cabo en el caso Guggenheim o si EB se mantiene fiel.

Si, como se espera, hoy se alcanza una acuerdo sobre el borrador, el tema se elevará a pleno. De hecho, la junta de portavoces de mañana decidirá el orden del día de los plenos del 19 y 22 de diciembre. PP y PSE pidieron, en su momento, que tanto las conclusiones de la Comisión Balenciaga como las del Guggenheim fueran abordadas en plenos monográficos.