En la entrevista que publica hoy GARA con el director de Nanogune, José María Pitarke, el físico vasco expone las funciones y los retos de esa nueva infraestructura científica. Nanogune es un centro dedicado a la investigación avanzada en nanociencia y nanotecnología. Entre sus objetivos está, además de las actividades de formación, experimentación, investigación y divulgación propias de esta clase de centros, la transferencia tecnológica al sector industrial.

Una de las mejores inversiones que se pueden hacer, tanto en tiempos de crisis como de bonanza, es la realizada en educación e investigación. Tal y como plantea el propio Pitarke, no sólo para el sector público, también para el privado, aunque en nuestro entorno no exista tradición al respecto. No obstante, la investigación avanzada y aplicada no se pueden desarrollar adecuadamente si en el resto de la educación y en la investigación básica no se invierte lo suficiente, ni económicamente ni políticamente. En este terreno no se puede obviar la nula cooperación entre las diferentes universidades vascas y la falta de estructuras nacionales. La cuestión lingüística no es menor, con especial atención a la situación del euskara, pero considerando también el bajo conocimiento de otros idiomas. Por ello es estratégico invertir más, pero también de abajo a arriba.