El Getxo Artea dejó escapar una oportunidad inmejorable para situarse en una zona más que tranquila de la clasificación. Los gualdinegros dejaron volar la victoria en el tiempo de descuento y se tuvieron que conformar con un empate que realmente supo a poco.

A los entrenados por Javichín y Karra les faltó tensión en su juego, y de eso supo aprovecharse un Valladolid que demostró en el terreno de juego todos los porqués que le sitúan como colista de la División de Honor.

El choque, disputado bajo un intenso frío en el estadio Pepe Rojo, no fue demasiado vistoso. El conjunto pucelano trató de llevar la iniciativa, pero se topó con un tempranero drop anotado por Palumbo. Pese a que los locales empataron pronto, luego los vizcainos fueron mejores.

Errores de bulto y una notoria falta de concentración de los amarillos, permitieron que Pico recortara distancias con un golpe de castigo, colocando el 11-18 en el marcador.

Y ya en el tiempo de descuento, cuando todo parecía decidido, Alejandro González se aprovechó del despiste generalizado de los gualdinegros para lograr un ensayo para el Valladolid que Pico se encargó de transformar para hacer el 18-18 final, que no hacía justicia, ya que los vascos fueron mejores, pero la falta de concentración en los minutos finales lo pagaron muy caro ante un rival flojo.

Con este partido, los jugadores getxotarras suman cuatro encuentros consecutivos sin perder, pero el regusto que deja el resultado no es precisamente agradable, más aún cuando la próxima semana reciben en Fadura al CRC Madrid.