Con las mismas apreturas con que lo comenzó afronta Osasuna su último compromiso oficial de este 2008, del que es mejor hacer borrón y cuenta nueva, a la espera de que el próximo año traiga algo más de sosiego a la parroquia rojilla, aunque si nos dejamos llevar por la «cuesta de enero» que se avecina, no se puede presagiar nada bueno.

Por eso mismo, el duelo contra el Getafe se presenta como la ineludible victoria que los navarros deben firmar si no quieren verse descolgados del furgón de cola y con muchos boletos de presentarse al final de la primera vuelta como una escuadra ya desahuciada.

Mientras que la deseada reacción no acaba de llegar, un segundo triunfo liguero en la antesala de las vacaciones navideñas al menos podría devolver cierta dosis de esperanza al entorno y una mejor manera de encarar el «himalaya futbolístico» que les espera a los de Camacho con la llegada del 2009.

Para tan capital choque, el técnico murciano volverá a confiar en los mismos hombres que cayeron en el tramo final del encuentro disputado en Huelva, con la ya esperada entrada en el once de Juanfran. El de Crevillente volverá al carril derecho después de cumplir un partido de sanción, mientras que el Cieza seguirá confiando en Font como enlace entre medio campo y delantera.

Justicia deportiva

En la línea de su discurso de las últimas jornadas, Camacho volvió a solicitar a los hados una mayor contribución con el equipo. «Sería justo que acabáramos el año dando una alegría y un bálsamo para nosotros, una continuación en el trabajo y más motivación, muchas cosas juntas», declaró el preparador osasunista.

A su juicio, Osasuna «ha sufrido en exceso esta temporada» y «podía tener muchos más puntos, habiendo hecho mucho para no estar ahí». «El coco es lo último que se puede perder. Una vez que estás último ya no puedes bajar más posiciones, todo lo que venga tiene que ser bienvenido y hay que luchar por ello», añadió.