China anunció ayer el envío de tres barcos de guerra al Golfo de Adén, frente a las costas de Somalia, para evitar los ataques de los piratas. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Liu Jianchao, declaró que dos destructores y un buque de suministro se incorporarán el viernes a la flota internacional que patrulla las costas. «Su principal misión consistirá en velar por la seguridad de los buques, de las tripulaciones y por la de los barcos que llevan ayuda humanitaria a organizaciones internacionales», afirmó.

«Los buques chinos se ajustarán estrictamente a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y a las leyes internacionales. Deseamos trabajar con los otros países y participar en misiones de ayuda humanitaria», manifestó. El martes, el Consejo de Seguridad autorizó durante el plazo de un año operaciones en el territorio de Somalia.

Irán también enviará un barco de guerra al Golfo de Adén para «proteger a los barcos comerciales iraníes de los piratas», anunció la radio estatal. «Es un área internacional, las Fuerzas Armadas llevarán a cabo cualquier decisión tomada por sus superiores», añadió.

Desde principios de año, los piratas han atacado 108 barcos