El líder de la junta militar en el poder en Guinea Conakry, el capitán Moussa Dadis Camara, aseguró ayer, en su primer discurso público, que «toda personas culpable de desvío» de fondos será «castigada» y que se renegociarán los contratos en el sector minero.

«Se castigará a toda persona culpable de desviar fondos del Estado en beneficio propio. Si es detenida, será juzgada y castigada ante el pueblo», declaró el capitán Camara, quien lidera el grupo de militares que el martes tomó el poder en el país, tras la muerte del presidente Lansana Conté.

El Consejo Nacional para la Democracia y el Desarrollo (CNDD), la junta militar, había invitado a los representantes de todos los partidos políticos, sindicatos, organizaciones sociales y líderes religiosos al campo Alpha Yaya Diallo, la escuela militar donde Camara pronunció su discurso ante un millar de personas.

Con un tono extremadamente firme, el líder de la junta hizo hincapié en los «grandes desvíos» de fondos registrados durante el régimen de Conté (1984-2008), aunque no acusó en ningún momento al jefe del Estado, a quien consideró «honesto». Afirmó que el golpe de Estado respondió a la «notoria corrupción del Gobierno» y a la «irresponsabilidad y la incapacidad manifiestas de la Asamblea Nacional», que negó a convocar elecciones legislativas (previstas en 2007).

«En el momento en el que el presidente estaba cansado, toda la gente que lo rodeó se llenó los bolsillos», aseguró el militar.

Además, indició que el sector minero está bloqueado, no hay extracciones en las zonas auríferas, y anunció una renegociación de los contratos.