Copa Asobal
Stranovsky deja en evidencia a un Portland con pocos recursos
El equipo antoniano fue a remolque durante toda la semifinal y no fue capaz de frenar los ataques del Ademar en ningún momento. Los once goles de Martin Stranovsky demuestran que el conjunto navarro no acaba de tomarle la medida a esta competición.
GARA | IRUÑEA
El Ademar de León se clasificó por segundo año consecutivo para la final de la Copa Asobal, después de derrotar claramente al Portland San Antonio por 31-26 en la segunda semifinal. Un encuentro que estuvo marcado por la extraordinaria actuación del extremo eslovaco del equipo leonés Martin Stranovsky, autor de nada más y nada menos que once tantos.
Por lo tanto, y al igual que en la pasada temporada, el conjunto antoniano cae en semifinales frente al Ademar aunque, a diferencia del pasado año -en esa ocasión lo hizo por la mínima (27-28)-, en esta ocasión el conjunto de Chechu Villaldea estuvo muy por debajo del nivel mostrado por su rival.
Una fulgurante salida de los ademaristas obligó a Villaldea a pedir tiempo aún sin cumplirse el primer tercio de la primera mitad (6-2, m.8). Stranovsky empezó su recital particular y amplió más la ventaja de los leoneses (8-3, m.10).
La escuadra navarra empezó a reaccionar por medio de Claus Jacobsen y Renato Vugrinec, recortando las diferencias al mínimo tras dos exclusiones consecutivas de su rival (11-10, m.23). Parecía que el Portland iba a dar la vuelta al marcador, pero Daniel Sarmiento puso orden en el juego y ralentizó el ritmo de su ataque para serenar el repliegue defensivo.
Tras la reanudación, como sucediera al inicio del encuentro, el Ademar salió con contragolpes muy efectivos. Aginagalde y Stranovsky rompieron la línea de contención navarra y con 21-14 (m.39), Villaldea debía volver a parar el encuentro y reorganizar su línea defensiva.
Aunque el Portland intentaba reaccionar en ataque se encontraba también la solidez del meta croata Mirko Alilovic, que había relevado a Vicente Alamo, y esto provocaba que el omnipresente Martin Stranovsky estableciese la máxima ventaja de los leoneses (26-18, m.48).
Sólo esporádicas acciones de Malmagro y Nickevic recortaron algo las diferencias finales que mostró el luminoso del Palau.