Sobre las cuatro de la madrugada de ayer caía aguanieve sobre Biarritz. Algo más de una hora después nevaba de manera suave en puntos alaveses como Azazeta, Aiurdin o Altube. La cota de nieve se situaba ya en torno a los 600 metros a esas horas. A las ocho de la mañana, los primeros copos compactos se dejaban ver en Arrasate y también por Eibar. Los foreros vascos en la web meteorológica de Meteored comenzaban a vigilar el primer temporal del año. Eran los primeros indicios de la ola de frío y nieve anunciada para esta semana, sobre todo más frío que nieve. Y así fue, al menos ayer.

Euskal Herria no recibía de blanco la visita de los Reyes Magos desde 1985, cuando registró uno de los eneros más gélidos y nevosos de las últimas décadas. En la capital bilbaina el espesor alcanzó los 15 centímetros y la ciudad quedó paralizada. Las mayores nevadas tuvieron lugar los días 7 y 8, y baste decir que en la capital donostiarra se organizaron improvisadas pistas de esquí. Las temperaturas, además, se desplomaron hasta registros récords del mes: de -16,2 en Iruñea, -13º en Legazpi, o de -10º en Donostia.

Sin embargo, no parece que esta ola de frío que nos llega de Escandinavia vaya a ser tan intensa como aquélla. Ayer, la nieve hizo acto de presencia pero de manera desigual en suelo vasco. Muchos, sobre todos los más jóvenes que hoy regresan a las aulas, se pasaron la jornada mirando al cielo y por las ventanas de casa.

Durante la jornada de ayer los problemas en la red viaria se localizaron, principalmente, en algunos puertos. El primero que registraba limitaciones al tráfico era el de Urkiola, pero sólo para camiones. A lo largo de la mañana se producían precipitaciones intensas en forma de nieve en la Autovía de Leitzaran a la altura de Irurtzun, y en las autovías del Norte y de la Barranca, siendo las precipitaciones más intensas en las zonas de Etxegarate, Azpirotz y Leitzaran. También lo hizo causando dificultades en los tramos alaveses de la N-I, la autovía de Altube y la N-240 entre Gasteiz y Legutio.

Precisamente, Etxegarate quedaba cerrado a primera hora de la mañana a la circulación durante cuarenta minutos, para dejar trabajar a los quitanieves, y otro tanto le sucedía al alto de Leintz-Gatzaga. También sobre las 10.00, en la parte guipuzcoana de la A-15 se producía un corte técnico de unos cuarenta y cinco minutos. Pero la normalidad fue la tónica dominante. A las 18.00, la red principal seguía abierta y sólo Urkiola permanecía cerrado, lo que daba idea de que el temporal, al menos en forma de nieve, no fue ayer consistente.

La nieve, desigual

Y es que una vez más la nieve cayó por barrios. Los que más suerte tuvieron ayer fueron municipios como Antzuola, Zumarraga, Urretxu o Legutio, donde sí podían disfrutar del manto blanco. En la costa, donde la esperaban tras los anuncios de la «cota cero», se quedaron sin ella.

A las nueve de la mañana, las primeras cortinas de nieve blanqueaban levemente Gasteiz, como también les ocurría en Oñati o en Arrasate o en Bergara. A mediodía, la agencia estatal AEMET actualizaba su parte de alertas y anunciaba hasta 10 centímetros de espesor de nieve para territorio alavés, donde su Diputación foral tiene preparado un operativo conformado por 61 personas y a 29 equipos quitanieves.

Esta vez, parece que Gasteiz volvía a ganar a Iruñea en esa particular guerra estadística por ver dónde nieva más. Y es que en la capital navarra cayeron algunos copos a partir del mediodía, pero tampoco fue a más. Sí lo hizo en la ciudad babazorra, que quedó blanca a rachas, pero sin que cuajara de manera relevante. Casi a las 18.00, trapeaba de nuevo sobre la capital alavesa, con ya -1º de temperatura, cubriendo esta vez sí las calles.

También en Donostia veían durante el día algún copo, pero en la mayoría de lugares se tenían que conformar, como en Bilbo, con algo de nieve granulada a ratos. Sí cuajó en algunos núcleos del interior guipuzcoano, lo que aprovecharon para lanzarse las primeras bolas de nieve del año. Pero con este panorama desalentador en la mayor parte de Euskal Herria para los que esperaban esa nieve anunciada casi a nivel del mar -y que a menudo se confunde con la cota-, todo parecía quedar ayer a expensas de lo que hiciera durante esta pasada noche.

En la comarca alavesa de Aiara, en lugares como Amurrio comenazaba a blanquear con seriedad a partir de las ocho de la tarde. En otros, como en Bermeo, por ejemplo, lo que soplaba a esas horas era un fuerte viento, con rachas de hasta 40km/h, y con 5º en el termómetro.

En la zona de Basauri veían por fin, con sorpresa y por unos pocos minutos, los primeros copos consistentes del día, lo mismo que en Zarautz -donde cogían una buena racha a nivel del mar- o Eskoritza, con lo que quedaba de manifiesto que la cota de nieve comenzaba a bajar ya entrada la tarde-noche. Incluso Zumaia agradecía los primeros copos del invierno.

En Urretxu, donde la nieve les visitaba por la mañana, lo hacía también a últimas horas del día, acumulando algunos centímetros. Incluso en las proximidades de Donostia se alegraban con la caíada de copos. En Debagoiena, por contra, se lamentaban por quedarse al margen de esta nevada, lo mismo que en la costa vizcaina. Todo lo contrario que en Gasteiz, donde sobre las nueve de la noche la nieve arreciaba con mayor fuerza, el termómetro bajaba y esa nieve ya seca comenzaba a cubrir las calles. Esa misma nieve se intensificaba por casi toda Araba ya entrada la noche.

Las previsiones apuntaban que hoy buena parte de Euskal Herria amaneciera blanca y, lo peor aún, helada, en esta vuelta al cole y vuelta al trabajo para la mayoría después del puente festivo. Todo apunta a una jornada complicada en las carreteras, ante la que sólo cabe paciencia y buen abrigo.