Maite SOROA | msoroa@gara.net
Libertad de elegir
Ya estamos, de hoz y coz, en plena campaña electoral y, como sucede desde que el apartheid se instaló también en las concurrencias electorales, siempre sale alguien a la palestra a tratar de demostrar las bondades del régimen de la exclusión.
En esta ocasión le ha tocado a Joseba Arregi que ayer, en «El Periódico», trataba de convencer a las catalanas (y a los catalanes, claro) de que aquí quien no vota a quien quiere es porque no quiere hacerlo. No se lo pierdan.
Recuerda el ex jelkide que «como en la antesala de todas las elecciones convocadas desde la ilegalización de Batasuna, aparece el debate de la licitud democrática de impedir que algunas opciones que no condenan la violencia puedan presentarse a las mismas. Se persiguen ideas, se dice. Se afirma que es injustificable que se impida que miles de vascos puedan votar a quienes representan su ideología». Y a él le parece que no, que todo es perfecto porque, asegura, «Eusko Alkartasuna afirma permanentemente que es independentista, que es de izquierdas, que persigue los mismos fines que ETA/Batasuna. Es más: el lendakari y el PNV han afirmado más de una vez que lo que les separa de ETA son los medios, pero no los fines -y muy pocas veces, que también les diferencian los fines-. Pero aún hay más: Aralar es una opción independentista, radical, mucho más de izquierdas que nada que pueda existir en el panorama político español de partidos. Y se presentan a las elecciones. Y obtienen representación. Y nada hay en España que intente impedirlo. Y no pasa nada. Nadie se escandaliza. Ni el llamado nacionalismo español». Si servidora fuera de EA, del PNV o de Aralar, estaría inquieta.
No tiene empacho Arregi en reconocer que «somos bastantes los que cuidamos la lengua vasca, incluso impartimos clases en la universidad en ella, la tenemos como lengua de familia y social, hemos sido nacionalistas hasta que el nacionalismo llamado democrático se subió al monte de Estella/Lizarra (...) y que consideramos correcto que esa nueva marca no pueda presentarse a las elecciones, porque, por no hacer, ETA/Batasuna no ha hecho ni el más mínimo esfuerzo por disimular que se trata de su representación. Obedeciendo a directrices de ETA conocidas por los ciudadanos vascos». Pues también somos bastantes las que consideraríamos correcto que todo el mundo se pudiera presentar. Incluido el propio Joseba Arregi. Por supuesto.