En una carrera impecable, Niels Albert se proclamó campeón del mundo de ciclocross en Hoogerheide (Holanda). Sven Nys, tercero, ya tiene sucesor, mientras que la esperanza local y gran favorito, Lars Boom, naufragó. El único que plantó cara a la selección de Bélgica fue el checo Zdenek Stybar, plata.

El tiempo fue frío, la temperatura rondó los cero grados, pero detrás de las vallas el ambiente fue excepcional, con miles de aficionados flamencos, y también algunos vascos, que abarrotaron el circuito.

Bélgica no fue esta vez un polvorín y actuó como un equipo para desbancar a Boom. El holandés se vio solo, rodeado de enemigos, y un problema mecánico también le lastró. En cualquier caso, no fue su día, perdió la concentración ante el vendaval de los belgas y tuvo que hincar la rodilla.

El circuito, rapidísimo, hizo que las dos primeras vueltas se rodaran en pelotón. Esa igualdad la rompió Albert, cogió unos metros y ya nadie le vio más hasta el podio. Sólo Stybar, plata el año pasado tras Boom, salió a por él, lo tuvo cerca, pero se vio obligado a ceder. La ventaja de Albert nunca bajó de los diez segundos.

Una vez más, Nys se quedó sin oro tras no poder seguir el ritmo de Stybar en persecución de Albert. Pero la experiencia es un grado, no se vino abajo y a falta de tres vueltas saltó del grupo perseguidor y se consolidó en la tercera plaza.

No hubo sorpresas ni cambio de posiciones. Albert alzó los brazos y ganó el oro, igual que el año anterior pero entonces en sub 23; y que en 2004, cuando se proclamó campeón junior. Igual que Boom el año pasado, Albert ha ganado el arcoiris en las tres categorías.

El cambio de generación es claro. Albert tiene 22 años y uno más tiene Stybar, que desde 2005 no se ha bajado del podio, pues fue doble campeón sub 23. Nys, por su parte, acumuló un bronce más, y lleva cuatro, por un solo oro.

Wellens se tuvo que conformar con el cuarto puesto, y por detrás entró un grupo de 12 unidades con franceses -Mourey, Chainel y Lopez-, italianos -Franzoi y Fontana-, y suizos -Zahner y Heule-. Más retrasado aún, vigésimo, llegó un contrariado Boom.

Percances de los vascos

Ruiz de Larrinaga y Murgoitio eran los dos vascos en liza. Tuvieron desigual actuación, aunque muy lejos del los primeros puestos. El vizcaino hizo una carrera digna y acabó el 30º, a casi tres minutos de Albert. «He tenido un percance en una curva, se me ha salido un tubular, he tenido que parar y meterlo yo. El resto de la carrera ha sido tratar de remontar», resumió Murgoitio. Peor le fueron las cosas al alavés, que fuera de carrera desde el inicio, acabó 41º, a más de cuatro minutos. «He tenido mala suerte en la salida, se me ha caído un corredor delante y me he quedado prácticamente el último. A partir de ahí, a mi ritmo, he tratado de solucionar la papeleta», explicó el de Ametzaga.

El talento de Vos

En la prueba femenina, duelo fue entre la campeona y talentosa holandesa Vos y la veterana y tetracampeona alemana Kupfernagel, con la estadounidense Compton como invitada de lujo. Kupfernagel intentó dejar atrás a sus rivales pero no pudo abrir hueco y en el sprint final Vos, con más chispa, ganó el oro, igual que en 2006, relegando como entonces a Kupfernagel a la segunda posición.