El arqueólogo Xabier Peñalver y su equipo de especialistas dio por finalizada, el pasado viernes, la campaña de trabajos de investigación en lo que se refiere al yacimiento de Praileaitz. Según detalló Peñalver a este diario, estos últimos cuatro meses han sido «especialmente duros» para los investigadores, a consecuencia del mal tiempo y del alto grado de humedad que han sido protagonistas en Euskal Herria. No obstante, los hallazgos realizados durante esta campaña -que se ha prolongado durante seis meses- han sido «muy importantes», sobre todo los que se han llevado a cabo en la segunda sala interior de la cueva, donde han trabajado con enseres equivalentes al periodo Epipaleolítico -fase final y postglaciar del Paleolítico-. Gran parte de la importancia de estos hallazgos reside en los ocres que se encontraron en esa zona: «El ocre está asociado a la edad magdaleniense, donde utilizaban lápices para pintarse pero, por otro lado, las pinturas que aparecieron en el interior de la cueva también están pintadas con ocre, por lo que, el hecho de que aparezcan cantidades importantes en los niveles en los que estamos trabajando es un dato a tener en cuenta», dijo el arqueólogo de Aranzadi. Asimismo, el equipo de especialistas que ha participado en las excavaciones ha encontrado restos de fauna, aunque hayan sido escasos: «Hay que repetir que en este yacimiento los elementos normales o habituales son muy escasos, lo que ha demostrado que esta cueva fue solamente ocupada con actividades diferentes a las demás, es decir, muy concretas y muy especiales, claramente rituales», dijo.

Nuevo proyecto

Después de cerrar la campaña de excavaciones, los especialistas se centran en las labores de clasificación y ordenación de las piezas halladas, a la espera de obtener nuevos permisos que hagan posible la apertura de una nueva investigación en 2009. Para ello, según explicó Peñalver, están elaborando un nuevo proyecto donde se fijan los objetivo para una nueva campaña de cara a este año y que esperan presentar en un breve espacio de tiempo ante la Diputación de Gipuzkoa.

A su juicio, el objetivo de este proyecto no será otro que dar continuidad a los trabajos de investigación en 2009, porque este yacimiento «nos ofrece importantísimos materiales e información» que permiten seguir avanzando en el conocimiento del Paleolítico en Euskal Herria.