La plataforma contra la red de alta tensión entre Gasteiz y Castejón presentó ayer sendas iniciativas contra el citado proyecto que pretende llevar a cabo la Red Eléctrica Española. Por un lado, presentaron una revista de carácter informativo que tiene como objetivo «paliar el déficit informativo» existente tanto en Araba como en Nafarroa. Alberto Frías, portavoz de esta plataforma, explicó a este respecto que se repartirán 5.000 ejemplares de esta publicación por las zonas afectadas, para dar a conocer tanto los datos técnicos del proyecto cómo las últimas posturas adoptadas por las instituciones.

En estos momentos, el procedimiento administrativo del proyecto de la REE se encuentra en la fase de consultas previas. Según explicaron en la comparecencia, esta nueva linea de alta tensión consistiría en una linea de doble circuito de 400 Kw de tensión y de alrededor de 110km de longitud.

Las distancias entre las torres, que tendrían una altura media de 46 metros, serían de 400 a 500 metros. «Estamos en un momento determinante, antes de pasar a la aprobación inicial, y la Diputación de Araba no puede alegar problemas competenciales para no entrarle al problema», valoró Frías.

Desde la plataforma dejaron claro que «existen otros pasillos determinados para este tipo de infraestructuras». Y es que, tal como explicaron los opositores a esta red de alta tensión, «la autopista eléctrica pasará por zonas de especial protección, lugares absolutamente referenciales».

Cargos electos

A continuación, Rafael Fernández de Retana, concejal de Arraia-Maeztu, zona que se vería afectada por la «autopista eléctrica», tomó la palabra en nombre de varios cargos electos tanto de Araba como de Nafarroa. Estos ediles ya han plasmado sus firmas en un escrito para «manifestar su total oposición» al proyecto de la REE y «solicitar al resto de instituciones que hagan lo propio». El acuerdo donde quedan recogidas estas rúbricas será enviado al Ministerio de Medio Ambiente de Madrid.

Hasta la fecha esta iniciativa ha recogido 100 firmas, 30 de ellas son de los alcaldes de las zonas afectadas en Araba y Nafarroa.