Costa Gavras, Stephen Frears y Bertrand Tavernier son algunos de los protagonistas que acudirán a partir de hoy a la 59 edición del Festival de Cine de Berlín.

Por el Oso de Oro competirán cineastas consagrados como Bertrand Tavernier con «En la bruma eléctrica» o Stephen Frears, que presenta en el certamen «Chéri», una cinta que reúne, después de veinte años, a tres de los artífices de «Las amistades peligrosas»: Stephen Frears, Michelle Pfeiffer y el guionista de «Chéri», Christopher Hampton (el que fuera también autor del guión que adaptó la novela epistolar de Choderlos de Laclos). Precisamente por su brillante adaptación, Hampton obtuvo uno de los tres premios Óscar que consiguió la cinta. Los otros fueron para el diseño del vestuario y la dirección artística. Ni Glenn Close, candidata a la mejor actriz principal, ni Pfeiffer, que competía por el Óscar a la mejor actriz secundaria, consiguieron sus estatuillas.

Años más tarde y tras su éxito con «The Queen», el cineasta británico bucea una vez más en la literatura francesa. Para su nueva apuesta, basada en la novela homónima de la escritora francesa Colette, «Cheri», Frears escogió Biarritz como escenario para sus localizaciones. Para ello, la ciudad labortana retrocedió en el tiempo hasta la época en la que se presagiaba la llegada de la Primera Guerra Mundial. Además de un escenario de lujo como el Hotel du Palais, Chéri cuenta también con un reparto nada desdeñable: Michelle Pfeiffer, Kathy Bates o el joven Rupert Friend, que protagoniza el papel de Fred Peloux, Chéri.

A caballo entre los dos continentes, Stephen Frears alterna proyectos de bajo presupuesto con producciones vinculadas a la industria de Hollywood. Hace unos meses Javier Hernández Ruiz publicaba «Stephen Frears: cronista camaleónico», un libro sobre un director para quien su «máxima prioridad es la historia». Una historia que le acerca a los asuntos de temática social, a personajes nada comunes y más o menos extraordinarios y casi siempre al margen. La literatura y la historia son la fuente de la que fluyen sus películas, y ambas le acercan a los temas sociales que rueda desde la cercanía hacia la tradición realista británica tocada por cierto aire posmoderno. «Mi hermosa lavandería», «Las amistades peligrosas», «Café irlandés», «Alta Fidelidad» o «The Queen» son algunas de las películas que ha rodado para el deleite de los cinéfilos. Algunos tendrán estos días la oportunidad de ver el resultado final de «Chéri» en Berlín.