La crisis económica provoca la desaparición de pruebas deportivas históricas
Las organizaciones responsables de la Vuelta al País Vasco y de la Euskal Bizikleta han decidido fusionar ambas pruebas en una sola, que se celebrará entre el 6 y el 11 de abril bajo la denominación de Vuelta al País Vasco, según se dio a conocer ayer en Donostia. Las entidades organizadoras han optado igualmente por sumar fuerzas y crear una única sociedad, Organizaciones Ciclistas Euskadi, que también se hará cargo de la Clásica Donostia-Donostia. La nueva estrategia de concentración cuenta con el visto bueno de la Dirección de Deportes del Gobierno de Lakua y de Euskal Telebista, ente que había apostado por esta fórmula ante la imposibilidad declarada de retransmitir las dos pruebas en condiciones aceptables.
El nuevo escenario supone, en realidad, la desaparición de la Euskal Bizikleta, prueba que resultó herida de muerte tras no ser incluida en el calendario UCI Pro Tour y que en los últimos años había quedado reducida a la mínima expresión tanto en el nivel de participación como en repercusión y financiación. Como en el caso de las Seis Horas de Euskadi, la crisis no perdona ni siquiera a las citas deportivas históricas.