GARA > Idatzia > > Eguneko gaiak

Elecciones del 1 de marzo

La esencia de Basta ya, en frasco pequeño. Porque el tamaño sí importa

Rosa Díez no se presenta a estas elecciones, pero sin ella UPyD sería invisible. El partido nacional español -según propia definición- que surgió de Basta Ya nació hace año y medio. Fue recibido con alborozo por los diarios de la derecha, que lo abandonaron al ver que no desgastaba al PSOE. Aún así, Rosa Díez recibe todavía muchos elogios de firmas de relumbrón. Más flores que votos.

p006_f01_199x108.jpg

Iñaki IRIONDO

UPyD y Rosa Díez, Rosa Díez y UPyD son el mejor ejemplo de que se puede hacer un hueco en política con cuatro titulares de sal gorda y una buena imagen. ¿Sabe alguien algo del programa electoral del partido? ¿Conocen a sus cabezas de lista? Probablemente las respuestas sean «poco» y «casi nadie», respectivamente. El ideario de UPyD es un revoltijo que recoge elementos característicos de la izquierda junto a otros de la derecha, un puzle en el que cada elemento sectorial parece estar redactado por una persona distinta de acuerdo a sus propias convicciones particulares.

¿Qué une a todas esas personas? ¿Qué aglutina a UPyD? El centralismo españolista, la visceralidad en la estrategia contra la izquierda abertzale y, sobre todo, el ser un partido pequeño que no necesita llevar su teoría a la práctica.

Minúsculo o inexistente

Para UPyD, el tamaño sí importa. Cuando un partido es grande y, por lo tanto, tiene la posibilidad de gobernar, ha de medir más sus actuaciones y, en ocasiones, debe contemporizar. Por eso, la troupe de columnistas, tertulianos y pontificadores que consideran que Mariano Rajoy es «un blando» han encontrado en Rosa Díez (Rosa Diez, sin acento, para Fernando Sánchez Dragó) su Agustina de Aragón. La Rosa Díez que, cuando estuvo en el PSE (un partido grande), gobernó de la mano del PNV y no quiso romper el Gobierno de coalición es hoy el frasco pequeño que recoge toda la esencia del españolismo.

A tenor de las encuestas que se van conociendo, UPyD va a continuar teniendo, también en la CAV, toda la libertad lingüística que exige para seguir diciendo lo que le venga en gana. Hay quien le atribuye un escaño por Araba y quien lo sitúa como un partido extraparlamentario.

Así podrá, por ejemplo, continuar diciendo que la CAV paga poco Cupo a España y que debería pagar más, y pidiendo la devolución a Madrid de la competencia de Educación.

Por estos lares, ha sido el PNV quien más empeño ha mostrado en agigantar el peso electoral de UPyD, colocándole como parte del trípode que podría llevar a Patxi López a Ajuria Enea. Saben los jeltzales que mentar a la ex consejera «pizpireta» (que diría Arzalluz) puede servir para movilizar a su base abertzale y, al tiempo, igual hasta consiguen que lime algunos votos a PSE y PP, que todo van a necesitar.

Dice la propaganda que UPyD reparte en la calle: «Somos revolucionarios». ¡Qué bonito! Eso sí que es ver la vida de color de rosa.

 

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo