Vaya final! Como se decía antes, «si tiene usted vídeo, grábelo y guárdelo en un buen sitio para poderlo recuperar siempre que esté necesitado de una dosis de buen baloncesto». Porque ha sido de esos partidos que quedan incrustados en la mente; un encuentro emocionantísimo, con muchas alternativas, donde se ha visto todo lo que se puede ver en un partido de basket. A falta de otras consideraciones, podemos decir que se ha tratado de una final muy táctica, llena de cambios defensivos por parte de ambos equipos; sobre todo en los dos primeros cuartos. Aíto ha salido con dos jugadores grandes en las alas para parar a Rakocevic, buscando ganar en los cambios defensivos, pero Dusko ha respondido bien ante estos desajustes.

Hasta el descanso el martillo constante de Teletovic y Sergi Vidal -creo que este último ha estado a un nivel excepcional-, han ido manteniendo al Baskonia ante Unicaja. Luego hay que subrayar otro aspecto ofensivo de los gasteiztarras. Con Rakocevic en el banquillo, parecía que iba a ser Tiago Splitter el encargado de sumar los puntos para el Tau, pero éste se ha encontrado con un excepcional Archibald -que independientemente del resultado, ha sido para mí, el mejor del encuentro-. Al final, con los dos almas materes baskonistas en el aspecto anotador eliminados en el banquillo, ha surgido el trabajo en equipo de los alaveses. El Baskonia se ha emancipado de sus dependencias individuales y ha comenzado a jugar en colectivo. En esta situación, cabe destacar a un Pete Mickael que ha trabajado excelentemente, y que con su garra y fuerza mental, ha sido sinceramente el artífice real del triunfo baskonista.

Otro tema interesante ha sucedido con las valoraciones de los equipos. Si nos fijamos en la valoración general, el equipo malacitano ha quedado bastante por encima del alavés -107 a 95-, pero es bien sabido que esas valoraciones no se trasladan siempre al marcador, y el Baskonia, basado en un gran trabajo, moviendo muy bien la bola y buscando sus opciones, jugando mejor en las transiciones, y ayudando mejor en las defensas, es quien se ha llevado al final el gato al agua.

Por último fijémonos en Carlos Jiménez. El jugador del Unicaja no ha sobresalido estadísticamente, pero sólo cuando él estaba en pista conseguía el Unicaja liderar el marcador.