El fiscal general de Colombia, Mario Iguarán, anunció ayer que agentes del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) iniciaron las inspecciones y registros en las salas externas e internas del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), los servicios secretos del país.

La investigación abarca «a los equipos que operan a través de satélites que permiten ubicar la información en el espectro electromagnético, como también a los equipos de interceptación portátiles de correos electrónicos y de celulares». Iguarán indicó que el propósito principal de estos registros es saber «quién está ordenando las escuchas telefónica y quién está utilizando la información. Hemos destacado dos fiscales y diez expertos para esta investigación».

Añadió que se hará una revisión total de todos los sistemas y de ser necesario, por la gravedad del caso, ordenará la suspensión de la sala de interceptación del DAS.

Asimismo, se procederá a interrogar a «las personas de inteligencia y contrainteligencia» y a revisar «los protocolos y los libros para establecer responsabilidades de carácter penal».

«La orden viene de Uribe»

En la larga lista de espiados figuran opositores, periodistas, jueces y funcionarios. Algunas de estas personas responsabilizaron directamente al presidente Álvaro Uribe. El congresista Gustavo Petro, del Polo Democrático Alternativo (PDA) y una de las voces más críticas del Gobierno, aseguró que la orden partió de Uribe. «Es indudable que la orden proviene del presidente, que es una persona que no tiene valores democráticos y a pesar de que cuenta con un gran respaldo de la opinión pública, él la usa para destruir lo poco que queda de democracia», declaró al semanario «Semana». Instó a Uribe a explicar por qué «se está investigando a la oposición democrática de Colombia, a la prensa libre y a quienes no piensan como él en vez de investigar a los criminales, muchos de los cuales entran al Palacio de Nariño a hablar con sus funcionarios».

En su edición del sábado, la revista propiedad del hermano del ministro de Defensa tituló «El DAS está fuera de control. Graba ilegalmente a magistrados, periodistas y políticos y se ha puesto al servicio de narcos, paras, guerrilleros».

El ministro de Interior y Justicia, Fabio Valencia, alegó que detrás de las escuchas están unas mafias. «Se ha confirmado que en el interior del DAS hay un grupo de delincuentes que, incluso han espiado a Uribe», dijo.