Aranburu compareció ante la Comisión de Cultura de las Juntas Generales de Gipuzkoa a petición del PP y reiteró que la reducción de 90.000 euros -de un millón a 910.000- en la aportación de la Diputación a Zinemaldia ha sido inevitable debido a la crisis económica. En ese sentido, anunció que está buscando patrocinadores para el certamen, con el fin de suplir la rebaja de la subvención foral, aunque aseguró que «no es fácil» lograr financiación privada. La diputada precisó que en su día adoptó «el compromiso» de conseguir espónsores y por ello está «realizando ese esfuerzo», pese a la dificultad que conlleva.

Aranburu subrayó que el recorte de la subvención no va a repercutir «de ningún modo» en la Sección Oficial del certamen, aunque reconoció que por el contrario algunas secciones o actividades paralelas tendrán que «aligerarse». Así, recordó que la crisis económica afecta a «todos» y señaló que el festival cinematográfico, como el resto de instituciones y otras celebraciones, deben «adecuarse a la realidad porque Zinemaldia no es una isla». Asimismo, apuntó que los recortes se han dado también en otros eventos culturales a los que la Diputación presta su apoyo.

Por su parte, el portavoz del PP en la Comisión, Iñigo Arcauz, mostró su inquietud por que la calidad del certamen donostiarra disminuya y, con ello, su repercusión internacional. «Nos preocupa la posibilidad de que pierda su nivel y con ello su categoría», añadió. La diputada subrayó que no le cabe «ninguna duda» de que el festival de cine es el evento cultural más importante de Gipuzkoa, pero que tendrá que adecuarse a la realidad económica.

Ajustes

Aranburo indicó que el hecho de que el IPC de 2008 haya aumentado un 1,4%, muy por debajo de las previsiones iniciales del 4%, da «un margen» que permitirá hacer «algunos ajustes» en la gestión del certamen, además de en otros eventos culturales. En la misma línea, Arcauz dijo que fue un «error» que no se aprobase la congelación de la partida destinada al certamen como plantearon inicialmente EB, PSE y PP, una propuesta que no prosperó ya que los socialistas acabaron retirando su enmienda a los presupuestos forales.