El Athletic, en la final
Parecía la final en lugar de una semifinal
Endika GUARROTXENA | Ex jugador del Athletic
El partido de vuelta de las semifinales de Copa ha generado tanta ilusión que impresionaba. Pocas veces se ha visto Bilbo así, sólo en las grandes ocasiones futbolísticas cuando se han celebrado los títulos de Liga y Copa que lógicamente superan cualquier ambiente. Por la mañana comentaba con Iribar que nunca habíamos visto movilizarse tanta gente con el Athletic como ayer, salvo en las celebraciones mencionadas. Cuando jugamos la semifinal contra el Real Madrid no hubo tanto jaleo. Quizás es porque los medios de comunicación sobredimensionan estas cosas o porque la gente necesita este tipo de sensaciones, pero lo cierto es que Bilbo presentaba un aspecto impresionante y muy bonito, más propio de una final que de una semifinal.
Y después acompañó el partido y el resultado. Me ha sorprendido el trabajo que ha hecho el Athletic, con esa presión y sin permitirle jugar al Sevilla que en toda la primera parte no ha podido llegar a la portería rojiblanca ni una sola vez. 3-0 y hasta abríamos podido meter alguno más. He visto a los jugadores del equipo andaluz bastante nerviosos, incapaces de jugar como acostumbran. Sin velocidad. El Athletic, por el contrario, consiguió hacer su partido, sin permitir licencias al Sevilla prácticamente hasta el final.
Sinceramente no he reconocido al Sevilla. Me ha parecido que no han sabido contrarrestar las armas del Athletic. Y ahora está de nuevo en la final, y con la afición volcada con el equipo. Como decía el otro día estamos en el año de las coincidencias. Tampoco esta vez nos hemos librado de las inundaciones, también cuando ganamos la Copa en 1984 en cuartos de final eliminamos al Sporting, jugamos las semifinales contra otro equipo que vestía de blanco -entonces el Real Madrid y esta vez el Sevilla- y la final contra el Barcelona. El Barça de entonces como el de hoy en día tenía en sus filas a un argentino que era un fenomeno. De Diego Armando Maradona a Leo Messi. Son muchas coincidencias. ¿Será una señal?