«Salvo que ganemos cuatro partidos seguidos, sufriremos hasta el final. Si no ganamos varios consecutivos, nos la jugaremos contra el Real Madrid el último día», vaticinaba el centrocampista de Osasuna Juanfran Torres en su declaración en sala de prensa tras la sesión preparatoria de ayer. El hábil centrocampista es consciente de lo mucho que hay en juego este domingo.

«Te puede agotar mentalmente pensar que, si pierdes, es mayor sufrimiento. Pero ése no debe de ser nuestro pensamiento. Hay que pensar que vamos a ganar y que vamos a salir del descenso».

Este argumento influye en el desarrollo del juego rojillo, según lo explicado por el propio Juanfran. «Tenemos respeto a la situación y eso nos hace no jugar igual. Tenemos que limpiarnos la mente y saber que tenemos que estar más tranquilos cuando tenemos la pelota y a la hora de finalizar. El nivel mental nos hace estar agarrotados. Hay que tener claro que si ganamos salimos y que tendremos dos semanas de cierta tranquilidad».

Por lo demás, el jugador alicantino fue cuestionado sobre su «pasado periquito». Sin dar mayores rodeos, el de Crevillente reconoció tener varios amigos en las filas del Espanyol, aunque también vino a decir que en la lucha por la salvación no existen ni amigos ni mucho menos conocidos.

«Tuve un año donde hice amigos y lo pasé muy mal también. Me duele que estén en esa situación porque tengo amigos y le cogí cariño al club, pero sinceramente me da igual cómo lo estén pasando», declaró.

En este sentido, Juanfran precisaba que «lo que más me importa es mi equipo y necesitamos ganar para salir de ahí y para que ellos no tengan las más claras».

«El Espanyol tiene jugadores importantes y la clave será no dejarles jugar con soltura. Tenemos que imponer nuestro ritmo cuanto antes», comentó.

Con Cruchaga y Pandiani

En lo que a la preparación para el choque ante el Espanyol, tanto Walter Pandiani como César Cruchaga hicieron buenas las positivas vibraciones de la víspera y pudieron completar la sesión preparatoria sin mayores contratiempos.

José Antonio Camacho llevó a cabo una sesión de trabajo eminentemente táctica, con acciones combinadas, táctica colectiva, ataque-defensa y contraataque, para concluir con un partido aplicado.

Por su parte, Roversio y Delporte continuaron con su trabajo individual supervisado por el readaptador físico. Mientras, Nacho Monreal y Nekounam no completaron todo el entrenamiento, ya que el técnico murciano decidió quitarles a ambos jugadores cierta carga de trabajo de su sesión.