Ni reformas, ni desmantelamiento
La huelga general que ayer se vivió en Ipar Euskal Herria y en todo el Estado francés, la segunda en dos meses, muestra a las claras que más allá de la popularidad con la que Nicolas Sarkozy accedió al Elíseo o de lo populista de algunas de sus actuaciones, la percepción que él mismo ha creado sobre su mandato como una especie de cheque en blanco de la ciudadanía para reformar los cimientos del Estado francés no es del todo real. Lo cierto es que los ciudadanos de la República ven cada vez con mayor desconfianza la imagen que el presidente transmite de sí mismo, presentándose como una suerte de heredero de los grandes personajes del ideario francés, como Napoleón o De Gaulle. Pero su guerra no es contra los ingleses o los argelinos, sino contra la clase trabajadora del hexágono y sus territorios de ultramar, como se ha podido comprobar recientemente en el caso de las Antillas.
Lo cierto es que el desmantelamiento del estado de bienestar en toda Europa es un trabajo que se ha ido realizando por fases en los diferentes estados, dependiendo de la balanza de poder imperante en cada momento y en cada lugar. Y cabe recordar en este punto que en muchas ocasiones han sido gobiernos considerados de izquierda quienes han dado esos pasos contra los intereses de los trabajadores y de las personas más desfavorecidas, estando precisamente los estados francés y español entre esos casos. No obstante, la respuesta sostenida a las propuestas de reforma de Sarkozy muestra el rechazo popular que tiene la agenda neoliberal y también la gran potencialidad de la movilización social para hacer frente a esa agenda.
La huelga general de ayer y su reflejo en Baiona, con una altísima participación popular en las movilizaciones, sólo tiene un punto negro que reseñar: el intento por parte del resto de sindicatos y convocantes por marginar a LAB, legítimo representante de muchos trabajadores que en sucesivas elecciones le han dado su apoyo. Un apoyo que ha crecido constantemente en Ipar Euskal Herria durante los últimos años.