El presidente estadounidense, Barack Obama, ha aprovechado la celebración del Newroz o Año Nuevo, una de las fiestas más importantes en Irán, para ofrecer al Gobierno iraní un diálogo abierto basado en el respeto mutuo. El mensaje, grabado en vídeo y subtitulado en farsi, fue distribuido por la Casa Blanca a los medios de comunicación, incluidos los de Oriente Medio, y también está en internet.

En tono conciliador, abogó por entablar una diplomacia diferente. «En esta estación de nuevos comienzos, me gustaría hablar claramente a los líderes iraníes», manifestó. Tras admitir la existencia de «serias diferencias que se han agrandado con el tiempo», resaltó el «compromiso» de su Gobierno con «una diplomacia que aborde toda la gama de asuntos pendientes entre nosotros y con la búsqueda de lazos constructivos entre EEUU, Irán y la comunidad internacional».

No obstante, advirtió de que «las amenazas no harán avanzar este proceso. Buscamos en cambio una diplomacia que sea sincera y se base en el respeto mutuo». «Ustedes tienen que tomar una decisión. EEUU quiere que la República Islámica de Irán adopte el lugar que le corresponde en la comunidad internacional», subrayó.

Aunque reconoció a Irán este derecho, dejó claro que «con él vienen acarreadas responsabilidades de verdad y ese lugar no se puede alcanzar mediante el terrorismo o las armas, sino a través de acciones pacíficas que demuestren la verdadera grandeza de la civilización iraní».

Durante la campaña electoral, expresó su disposición a dialogar directamente con los países con los que Estados Unidos tiene malas relaciones, entre ellos, Irán. En su investidura el pasado 20 de enero, mostró su intención de «extender la mano si ustedes sueltan su puño». Desde entonces, el Departamento de Estado ha repetido este mensaje en diversas ocasiones.

Horas después y sin responder directamente a Obama, el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, expresó su deseo de que la llegada de la primavera sirva para que «la justicia reemplace el odio y a la discriminación en la escena internacional».

En un discurso pronunciado con motivo del Newroz, incidió en que «la humanidad debe construir un mundo caracterizado por la paz, la estabilidad y la amistad, que se cimiente sobre la ética y la espiritualidad».

A los ojos de los analistas

Analistas políticos resaltaron el momento en el que se difunde el mensaje y el papel que Irán juega en la región.

«Es un elemento central en la resolución de los mayores desafíos que Obama debe afrontar en materia de política exterior. Él es muy consciente de ello», consideró Joe Cirincione, presidente del Ploughshares Fund, instituto especializado en cuestiones de seguridad.

Contrastó la actitud de Obama con la línea dura y conflictiva de George W. Bush, que colocó a Irán en su «eje del mal», junto a Irak, en tiempos de Saddam Hussein, y a Corea del Norte.

En su opinión, además, «hay cierto parecido con la aproximación que Nixon tuvo con China en los setenta, cuando abrió un diálogo con Beijing para contrarrestar la influencia de la Unión Soviética en Asia».

Por su parte, Trita Parsi, presidente del El Consejo Nacional Americano Iraní, consideró que llega en un momento en el que Washington reclama la implicación de Teherán para rebajar las tensiones en Afganistán. Para ello, agregó, busca la participación de Irán en la cumbre ministerial que se celebrará el 31 de marzo en La Haya.