El Consejo Económico y Social (CES) Vasco debatió sobre «Crisis inmobiliaria, crisis económica y perspectivas» dentro del recién creado foro de «La Tribuna del CES». Quedó claro que la crisis perdurará durante 2010, porque no se atisban en este momento signos de mejora real de la actividad económica, productiva y del empleo.

El presidente del organismo socioeconómico, José Luis Ruiz, realizó una introducción sobre la evolución general del sector inmobiliario, que retrocedió en un 14,2% en la construcción de viviendas, lo que generó la pérdida de 5.800 empleos en el sector de la Construcción.

Julio Rodríguez López, doctor en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid y, entre otros cargos, ex presidente del Banco Hipotecario y de la Caja de Granada, abrió con bisturí estadístico al sector, para reconocer que en la «época dorada de 1998 a 2007» creció «muy por encima de sus posibilidades». A su juicio, «la política monetaria debe estar atenta no sólo a la evolución de los precios de bienes y servicios, sino también a la de los precios de los activos -acciones, vivienda, otras propiedades-» y recordó que «un auge inmobiliario tan intenso y prolongado, como el de 1998 a 2007, no hubiera tenido lugar en el Estado español sin la colaboración activa de las entidades de crédito».

Racionar el crédito

El ex presidente del Banco Hipotecario reconoció la desproporción actual entre el tipo del euribor (2%) y el interés medio de los préstamos hipotecarios (en torno al 5%), teniendo en cuenta que el precio del dinero se sitúa en el 1,5%. Julio Rodríguez dijo que «es una manera de racionar los créditos, porque antes se concedieron sin garantías y existe mucho temor a quedarse sin liquidez», aunque añadió que ese diferencial es «injusto». A su juicio, es necesario «fortalecer la solvencia de las entidades de crédito. La concentración se debe favorecer sólo si con ello se logra una mayor solvencia y se normaliza el flujo de crédito»

Recordó que en 1997, en pleno apogeo económico, una familia necesitaba cuatro sueldos y medio para comprar una vivienda de 90 metros cuadrados y un préstamo a veinte años. En 2007, fueron necesarios casi nueve sueldos y medio y en 2008 se ha reducido un poco hasta los 8,7 sueldos. Esta situación se ha producido por «el incremento notable» de los precios, ya que se elevaron a un ritmo del 11,5% anual, lo que significa que «se ha duplicado el precio de la vivienda en ese período dorado de la actividad».

60% del salario familiar

En este caso, el ex presidente del Banco Hipotecario destacó que en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se necesita el 60% de la renta familiar de un «hogar monosalarial» para hacer frente a la hipoteca de la vivienda. Es el nivel más elevado del conjunto del Estado español, mientras que en Nafarroa se sitúa cerca del 40%, casi en el extremo más bajo. No obstante, adelantó que el precio medio de una vivienda de protección oficial en la CAV es el más bajo del conjunto.

Por otro lado, Julio Rodríguez recordó que la crisis actual tiene similitudes con la que se produjo en 1973 y 1974, porque, «junto a una situación de exceso de oferta en el mercado de vivienda, se ha producido un descenso importante de la demanda interna de la economía, difícil de corregir en este momentos a través de las exportaciones».

También insistió en que «hasta que Estados Unidos no salga de la crisis, no habrá mejoras». Adelantó que habrá «un adelgazamiento del sistema financiero» y dijo que «si no se resuelve el problema del paro, no se venderán viviendas». Según los datos que aportó, entre 1998 y 2007 el crédito al promotor inmobiliario creció un 33% de media anual frente a un 7,8% en 2008. «Es exagerado», precisó. Reconoció que el 60% de los préstamos los han concedido las cajas de ahorro, por lo que son las que más están sufriendo los índices de morosidad y el peligro de quedarse sin liquidez. Según expresó, la incidencia desorbitada del crecimiento inmobiliario no se ha producido de igual manera en el conjunto del Estado español, ya que Hego Euskal Herria se encuentra en una mejor posición.