Ayer muchos noticiarios volvieron a repetir el parte de guerra lanzado por el Ejército de Franco hace justo 70 años: «En el día de hoy, cautivo y desarmado el Ejército rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado». Y ayer fue también el día elegido por Ahaztuak 1936-1977 para presentar su campaña «Ni cautivos ni desarmados».

Su portavoz, Martxelo Alvarez, explicó en Bilbo que con ello no quieren decir que «hayamos refundado el Ejército rojo ni estemos armados», pese a lo que el Gobierno español ha prohibio el homenaje previsto el día 6 a dos antifranquistas muertos en Ultzama. Lo que desean con la campaña, añadió, es «rememorar y honrar a todas las personas que dieron todo para que aquel infausto `Día de la Victoria' no llegara, y para que los valores de libertad, justicia social y respeto a la voluntad popular siguieran vigentes en el Estado español».

La campaña se abrirá realmente el domingo en Berriatua, donde con la colaboración del Ayuntamiento se repondrá en el balcón consistorial, a través de un juego de luces, «la bandera republicana original que ondeaba el día en que el pueblo fue tomado por tropas italianas».

Ahaztuak se sumará luego a la convocatoria de Aberri Eguna del día 12, y el 13 celebrará su Día de la República en Eibar. El martes 14 estará en los actos que se celebrarán en el cementerio de Ciriego (Santander) por los fusilados, entre ellos un cente- nar de vascos. El día 18 se homenajeará en Gaseiz a Bod Doyle, brigadista irlandés recientemente fallecido, y el 25 en Iruñea al comandante de la Guardia Civil José Rodríguez Medel, primer muerto por los franquistas en la capital navarra. El día 26 se sumará además al aniversario del bombardeo de Gernika, y antes de acabar el mes acudirá a Frechilla (Palencia).