Zornotza y Roubaix
Imprescindibles de primavera
Damiano Cunego y Tom Boonen intentarán reeditar su éxito de la temporada pasada en la Klasika Primavera y la Paris-Roubaix.
A.U.L. | EIBAR
Poco importa si esta temporada se lleva el verde, la manga francesa o las hombreras. Cada estación tiene sus imprescindibles, por muchos años que pasen. O precisamente por alcanzar las 55 y 107 ediciones respectivamente, la Klasika Primavera y la Paris-Roubaix se convierten hoy en dos citas ineludibles para los amantes del ciclismo.
En ambos casos, sus últimos vencedores parten entre los favoritos para reeditar victoria. También repetirá rivales Damiano Cunego en Zornotza, donde se las volverá a ver con los gallos de Caisse d'Epargne. Especialmente con Joaquim Rodríguez, ganador un año antes y que incluso abandonó anteayer la Vuelta al País Vasco para encontrarse más descansado. Tampoco habrá que perder de vista a Roman Kreuziger (Liquigas), los hombres de Saxo Bank (Kolobnev, los hermanos Schleck) o los de Euskaltel-Euskadi, que llegan a Zornotza con Astarloza, Antón y Egoi Martínez a la cabeza. Serán un total de 16 equipos los que tomen la salida, incluyendo seis escuadras UCI ProTour y la selección rusa.
La prueba, cuyo final está previsto para las 13.20, mantendrá el trazado habitual, con 171'6 kilómetros y una clave, las tres pasadas por los altos de Muniketa (2ª) y Autzagane (3ª). El último de ellos a menos de cinco kilómetros de la línea de meta y, por lo tanto, juez casi definitivo del resultado.
Más pavés
En Compiègne, punto de salida de la 107ª Paris-Roubaix, todas las miradas estarán puestas en Tom Boonen. Principal favorito por tratarse del último vencedor, por su especial motivación, al encontrarse a un triunfo de igualar a mitos como Eddy Merckx o Johan Musseew, que se subieron en tres ocasiones a lo alto del podio; y también por la insultante superioridad que ya mostró Quick Step hace una semana en Flandes.
Precisamente por lo allí visto, se espera un estrecho marcaje de Filippo Pozzato al flamenco, aunque también intentarán seguir su rueda los Columbia (Hincapié, Boasson-Hagen), los Cervélo (Haussler, Hushovd), Flecha, Guesdon, Hoste o incluso Servais Knaven, que hoy acomete su 15ª participación en el Infierno. A Sylvain Chavanel y Stijn Devolder les toca ayudar o, dependiendo de cómo vaya la carrera, aprovechar la vigilancia a su líder. Mas dudas despierta Fabian Cancellara, vencedor hace dos años, pero protagonista de una accidentado inicio de año, por lo que la prueba se le presenta especialmente dura.
Lo será más que de costumbre, porque los 259 kilómetros entre Compiègne y el velódromo de Roubaix aumentan los tramos de pavés, hasta rozar los 53 kilómetros de «tortura». El récord de la centenaria prueba.
Armstrong y el Tour
Lance Armstrong admitió a través de su página web que, «seguramente», la Agencia Francesa en la Lucha Antidopaje le impedirá «participar en la prueba» , después de que ésta asegurase que el norteamericano había cometido irregularidades en un control sorpresa -vigésimo al que se somete desde su regreso a la competición- el pasado mes de marzo.
Lo cierto es que el análisis no arrojó resultados anómalos, pero Armstrong «no cumplió con la obligación de permanecer bajo observación directa y permanente de la persona responsable del control».