«ETA es nuestro objetivo prioritario». PSOE y PP parafrasearon la expresión utilizada por la organización armada para dar réplica a la declaración hecha pública ayer, con motivo del Aberri Eguna de 2009. Por su parte, formaciones vascas como Aralar o EA aseguraron que sus afirmaciones no les va a condicionar.

Las formaciones que lideran José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy no tardaron esta vez en responder al comunicado, y lo hicieron desde Euskal Herria y en términos idénticos. José Antonio Pastor, portavoz parlamentario del PSE, mostró su «voluntad inequívoca de usar todas las armas del Estado de Derecho para acabar definitivamente con ETA». Y añadió que el nuevo Gobierno de Lakua será importante en este terreno porque permitirá «intensificar el trabajo con el Gobierno de España para, juntos, acabar con ETA lo antes posible».

El comunicado de la organización situaba al futuro Gobierno de Patxi López como «objetivo prioritario». José Antonio Pastor respondió que «incluso el hecho de que se le amenace directamente no hace sino reafirmar a los socialistas en que es absolutamente necesario e imprescindible unir las fuerzas de todos los demócratas para luchar contra ETA».

Desde el PP, su líder en la CAV, Antonio Basagoiti, dijo igualmente que la posición de ETA es un acicate para el pacto PSOE-PP que llevará a López a Ajuria Enea. «Es más importante que nunca llevar adelante el cambio que estamos negociando socialistas y populares, porque ese cambio tiene como objetivo acabar con el terrorismo de una vez por todas, acabar con sus justificaciones y acabar con su siembra de fanatismo». «El cambio no lo va a parar nadie, ni la deslegitimación de algunos ni las amenazas directas de la banda terrorista ETA», añadió.

Formaciones vascas

Además de las consideraciones sobre el nuevo Gobierno «fascista» de Lakua, el comunicado de ETA expresaba la voluntad de consensuar una estrategia única con los partidos vascos, pero les advertía a la vez de que no cabe pedirle nada si no se adoptan compromisos contra la represión y por la autodeterminación. Ante ello, Aralar replicó instando a ETA a «que abandone definitiva y unilateralmente las armas y deje a los políticos hacer política».

El encargado de valorar el comunicado fue el número dos de la formación, Jon Abril, que dijo en Irun que «ETA ni asusta ni amedrenta a Aralar, que desde luego no acepta ningún tipo de descalificación ni de amenaza».

Por parte de EA, Maiorga Ramírez, presidente en Nafarroa, afirmó igualmente desde Irun que el mensaje de ETA «en nada ayuda a cualquier tipo de reivindicación nacional, que debe articularse a través de vías civiles y políticas». Afirmó que su partido «no se va a sentir mediatizado por estos comunicados». También el máximo mandatario en funciones, Koldo Amezketa, opinó desde el acto central del partido en Gernika que «no necesitamos ningún guía que nos diga el camino», y afirmó que así se lo han hecho saber a ETA muchas veces.

En el acto de Aberri Eguna del PNV en Bilbo, el todavía lehendakari, Juan José Ibarretxe, trasladó a ETA que «por la patria se puede morir, pero no matar».

El sindicato ELA manifestó que la autodeterminación se tiene que reivindicar «por medios exclusivamente civiles y democráticos. Es la única posibilidad de ganar ese debate al Estado», valoró Adolfo Muñoz, Txiki.