El Teatro Arriaga da un paso al frente y produce, por primera vez en su historia, un espectáculo de danza. La obra elegida ha sido «Pobres bestias», creada por la compañía vasca La Intrusa y muy especialmente por la coreógrafa gasteiztarra Virginia García, directora artística de la compañía junto con el también coreógrafo gasteiztarra Damián Muñoz, quien el pasado 30 de marzo se hizo con el premio Max al Mejor Intérprete Masculino de Danza por su espectáculo «Staff». Según ambos, «ha supuesto un experimento y un reto que un teatro clásico como el Arriaga apueste por la danza de vanguardia», obedeciendo a una intención de «renovar el público y mirar abiertamente a lo que se está desarrollando actualmente en los principales teatros europeos».

Crisis del alma humana

Los fundadores de La Intrusa presentaron el espectáculo, que muestra la poca fe en las personas que viven de espaldas a la honradez y la bondad. En él, «actuamos de tal manera que cada uno de nuestros actos está sometido a una ley universal: la buena conciencia». Pero los pensamientos «son libres de ser todo lo perversos que quieran». Por lo tanto, «Pobres bestias», espectáculo de vanguardia que combina danza, música y vídeo, se adentra «en la autenticidad del espíritu y del alma del ser humano». A pesar de cierto pesimismo latente, -según Muñoz la primera versión del texto era «un drama muy grande»-, García se mostró ayer optimista al afirmar que «cuesta domesticar a cada una de nuestras bestias, pero queda esperanza y mucho amor en el ser humano».

Una vez estrenada en el Teatro Arriaga, la intención de la compañía vasca de danza es girar con «Pobres bestias», aunque al estrenarse en mayo -«sabemos que es un poco tarde»-, tendrá que ser «el próximo otoño e invierno y, principalmente, en 2010».

En escena, junto al tándem creativo Muñoz y García, actuará también el actor Jorge Fuentes, quien según los protagonistas «aunque en un principio no estaba previsto que bailara, se ha incorporado a la danza de una manera muy natural». La escenografía de la obra convierte el tablado en un «sencillo plató» en el que muestran la «teatralidad de la vida diaria».

De la composición musical se ha encargado Enric Montefusco: «Ha sido un lujo tener libertad a la hora de dar forma a los textos y encontrar un lenguaje propio entre la belleza de las cuerdas, el rock y la música electrónica». El Quartet Brossa de cuerda actuará en directo en la función que se estrena mañana jueves a las 20.00 de la tarde, y permanecerá en el Arriaga hasta el sábado.