El Coliseum Alfonso Pérez no es un estadio en el que le guste jugar a Osasuna. Botón, con mucho viento, dimensiones en las que se manejan muy bien los locales... Hasta ahí. Porque en lo que a resultados se refiere, tampoco les ha ido tan mal en los últimos tiempos a los rojillos.

De las últimas siete visitas ligueras -las cuatro más recientes en Primera-, sólo en una ocasión la escuadra navarra ha hincado la rodilla. Fue en la 2006-07, cuando los entonces diri- gidos por `Cuco' Ziganda cayeron por 2-0.

Sobre todo lo que ha primado en los recientes enfrentamientos entre rojillos y azulones ha sido más bien el raquitismo goleador. Hasta tres empates a cero se computan en los últimos cinco encuentros disputados en el estadio getafense.

La dinámica se rompió el año pasado cuando se obtuvo la primera victoria a domicilio de los encarnados en la máxima categoría (0-2). Idéntico resultado se había cosechado en la 1994-95, pero en ese caso en la categoría de plata. Repetir triunfo sería la mejor noticia para un conjunto necesitado de romper su última dinámica perdedora.

Camacho, sólo en Primera

El presidente de Osasuna, Pachi Izco, confirmó que el actual técnico rojillo, José Antonio Camacho, sólo seguirá dirigiendo a la plantilla caso de que el equipo se salve. «Cuando llega aquí, nos da la opción de continuar un año más, pero es el club el que no querría y no vería con buen grado que Camacho siga en Segunda. No podríamos tener un entrenador con su sueldo», declaró el máximo mandatario del club navarro.

Izco estuvo en el vestuario para hablar con los jugadores «y darles un empujoncito porque este equipo tiene fútbol suficiente como para salir de ahí y vamos a hacerlo», señaló.