La Cámara de Diputados de Brasil aprobó en la noche del miércoles una polémica norma que tiene por objeto «regularizar» la apropiación ilegal de tierras públicas en la Amazonia. Esta ley entregará títulos de propiedad a los «fazendeiros» (grandes propietarios de tierra) y empresas que ocuparon tierras de hasta 1.500 hectáreas en la región antes de 2004.

«Se está privatizando la tierra ya ocupada ilegalmente y, en consecuencia, se fomentará aún más la ocupación ilegal», declaró a France Presse el director de la ONG Amigos de la Tierra, Roberto Smeradi.

Esa regularización permite que quienes invadieron la tierra, explotaron la madera, criaron ganado y la alquilaron para cultivar soja obtengan el título de propiedad para poder venderla a quienes están invirtiendo en adquirir tierras en la región, señaló el director de campañas de Greenpeace, Sergio Leitao.

El Gobierno tiene previsto dar 300.000 títulos de propiedad de unos 60 millones de hectáreas, asignadas en su mayoría al Instituto de Reforma Agraria. Pero la presión de los ruralistas aumentó en unos 100.000 el número de beneficiados y elevó de diez a 30 años el periodo dado para recuperar las áreas devastadas. Este aumento fue aceptado por el Gobierno porque lo autoriza la actual legislación forestal. En la Amazonia la legislación ambiental obliga al propietario a preservar intacto 80% del terreno.

El ministro de Medio Ambiente, Carlos Minc, defiende la regularización. «Cuando existen 300.000 personas ocupando tierras sin estar regularizadas, no tienes a quien multar y responsabilizar si no respeta la ley ambiental», argumentó.

La ley pasará ahora al Senado.