La renovación de Uribe puede estar al caer
GARA | EIBAR
Aunque Josu Uribe está muy lejos de haber ejercido como revulsivo -sólo ha sumado tres puntos en diez partidos-, objetivo con el que se le contrató, su trabajo parece estar satisfaciendo a la directiva del Eibar que, de hecho, maneja la posibilidad de renovar su contrato.
El propio técnico ha reconocido en más de una ocasión que, pese a no existir un posicionamiento oficial, la predisposición parecía buena por ambas partes. Ahora parece haber algo más que predisposición y, pese a que la operación no se vea con buenos ojos por parte de la afición -más aún después de saberse que Javier Mandiola estaría dispuesto a regresar-, el acuerdo podría alcanzarse incluso la próxima semana.
Claro que, entre otros aspectos, dependerá en buena medida de lo que suceda mañana. El farolillo rojo llega a Ipurua y todo lo que no sea el reencuentro de los azulgranas con la victoria -el jueves se cumplieron tres meses desde su último triunfo, todavía con Pouso en el banquillo- puede desembocar en un divorcio considerable entre el club y la hinchada, además de complicar considerablemente la posible renovación del técnico. Un empate o una derrota, de hecho, podría traducirse en el descenso directo a Segunda B.
Muchas bajas
Lo cierto es que el Eibar no afronta el partido en las mejores condiciones. Con las bajas aseguradas de ocho jugadores y las dudas de Paco Sutil y, en las últimas horas, Txema Añibarro, Uribe se verá obligado a volver a recurrir al filial para completar la convocatoria.