Bruselas presenta su propuesta para vigilar los mercados financieros
La Comisión Europea planea modificar el modelo de regulación y supervisión del sistema financiero para evitar que se repitan crisis como la actual y, con ese objetivo, plantea aumentar la coordinación entre las autoridades estatales y poner en marcha nuevos organismos de vigilancia: un consejo encargado de emitir alertas en caso de riesgos y una nueva autoridad supervisora supraestatal.GARA |
El Ejecutivo de la UE publicará hoy un proyecto para crear el Consejo de Riesgos Sistémicos -encargado de preservar la estabilidad del conjunto del sistema financiero y emitir alertas en caso de amenazas- y el Sistema de Supervisores Financieros -formado por tres nuevas autoridades, responsables del sector bancario, asegurador y bursátil-. Las propuestas de Bruselas han generado rechazo incluso antes de ser presentadas oficialmente, principalmente de Gran Bretaña, que se resiste a dar poderes vinculantes a las nuevas autoridades comunitarias de supervisión encargadas de adoptar estándares normativos comunes y mediar en caso de desacuerdo entre supervisores estatales.
La oposición de Londres a que el Banco Central Europeo (BCE) -en el que no está representado, al no pertenecer al euro- controle el nuevo Consejo de Riesgos Sistémicos también ha llevado a Bruselas a plantear que la presidencia del nuevo órgano la ocupe el presidente del BCE, o alternativamente el gobernador de un banco central de un estado miembro.
El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, discutió ayer con el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso estas iniciativas en una reunión informal en la que también analizaron la coyuntura económica y financiera.
El objetivo de la Comisión es que los líderes de los Veintisiete respalden su estrategia de reforma financiera en la cumbre que los reunirá en Bruselas los próximos 18 y 19 de junio, para ir aprobando iniciativas legislativas más detalladas a lo largo del otoño. Bruselas pretende que el nuevo sistema de supervisión empiece a funcionar ya en 2010 aunque para ello antes necesita convencer a los Gobiernos y después una rápida tramitación de las normas.
El plan no supondrá en ningún caso -como se han esforzado por dejar claro desde la Comisión- quitar competencias a los supervisores estatales, que seguirían siendo responsables de vigilar la actividad diaria de las entidades en su territorio.
Las nuevas autoridades supervisoras paneuropeas sí marcarán los criterios comunes de supervisión y decidirán en caso de disputa entre dos o más organismos estatales. Bruselas también contempla asignar a estas autoridades la vigilancia de algunas entidades específicas cuya actividad es puramente internacional, como las agencias de calificación de riesgos.
La ONU retrasa su cumbre
Por otro lado, Naciones Unidas retrasó hasta el 24 de junio la cumbre de dos días sobre la crisis financiera, donde se intentará presentar propuestas para una nueva arquitectura financiera internacional. Enrique Yeves, portavoz del presidente de la Asamblea General de la ONU, Miguel D'Escoto Brockmann, indicó que la cumbre ha cambiado su inicio, previsto para el 1 de junio, para dar cabida a los Estados que pidieron más tiempo para negociar un proyecto de propuesta sobre la manera de mejorar el sistema financiero mundial.
La cumbre tiene el objetivo de identificar las respuestas de emergencia y a largo plazo para mitigar el impacto de la crisis económica, especialmente en la población vulnerable. Ningún líder de los países ricos tiene previsto asistir.