David López completó la mejor actuación vasca en el Giro pese a sacrificarse en beneficio de Arroyo
Di Luca recorta en el sprint trece segundos a Menchov
Franco Pellizotti se impuso en la llegada en alto del Blockhaus y arrebató el liderato de su equipo a Basso y la tercera plaza en la general a Sastre. Sólo 26 segundos separan a los favoritos a falta de cuatro etapas.
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
Danilo Di Luca recortó 13 de los 39 segundos que le llevaba Denis Menchov en un sprint final en la meta del exigente Blockhaus. En la meta el ciclista ruso afincado en Gorraiz dio muestras de debilidad por vez primera en las etapas de montaña en el Giro, lo que alimenta la emoción por el triunfo final. Franco Pellizotti logró la victoria en la minietapa de 80 kilómetros y consiguió alzarse a la tercera plaza y reivindicar el liderato del Liquigas tras la polémica creada con Ivan Basso.
En todas las etapas de alta montaña Liquigas ha trabajado duro para endurecerlas para preparar el terreno al ganador del Giro del 2006, que en muchos momentos ha perjudicado a Pellizotti sin hacer una táctica de equipo. Pero ayer Liquigas no apareció en una etapa corta que quiso convertir en una cronoescalada como la que ganó el año pasado en el Giro. En las primeras rampas del Blockhaus Silvester Szmyd se adelantó al grupo de los favoritos para preparar el ataque de Pellizotti, que atacó desde abajo del puerto y consiguió su tercer triunfo parcial en su carrera favorita, con 42 segundos sobre Stefano Garzelli.
El ganador del Giro de 2000, que, como todo el Acqua & Sapone, ha dejado en evidencia a la organización por no invitarles a la pasada edición, fue el único que aguantó el ritmo de Danilo Di Luca, muy motivado ante su público de Abruzzo. Desde el momento en que se le fue Pellizotti asumió toda la responsabilidad sin recibir ningún relevo de Menchov, Garzelli y Basso.
La lucha por la bonificación
El líder del Giro seguía el ritmo de Di Luca sin inmutarse y respondía a sus ataques sin problemas y la duda estribaba en conocer si le iba a disputar la bonificación tras subir todo el puerto a rueda ante su público. Pero la sorpresa llegó cuando Menchov no pudo seguir la estela de Di Luca en el sprint y cedió cinco segundos que, sumados a los ocho de bonificación, lo dejan con sólo 26 de ventaja.
Eso casi garantiza la emoción hasta la última crono porque Di Luca puede entrar en la disputa de las etapas, que dan 20 segundos de bonificación. Mañana llega la jornada clave con final en el Vesubio, pero la de hoy acaba en Benevento en ligera subida, y habrá que ver si LPR la intenta aprovechar para lograr los veinte segundos de bonificación.
El gran perdedor de ayer fue Sastre. No le sentó bien una etapa tan explosiva y menos tras un día de descanso. Cervélo trabajó para que el abulense repitiera su subida de Monte Petrano, pero no pudo. También a Arroyo se le atragantó la subida y eso impidió a David López llegar más adelante en la mejor actuación vasca de este Giro.
Tras varios días en los que el Liquigas trabajó y atacó con Basso en perjuicio de Pellizotti, con polémica abierta, ayer el ganador señaló que «tanto Ivan como yo estamos en carrera en la disputa del podio y eso quiere decir que no trabajamos tan mal».
La Gazzetta dello Sport, diario organizador de la prueba, hizo público ayer que Denis Menchov ha sido citado en Austria para declarar dentro de una investigación de dopaje relacionada con el laboratorio Humanplasma de Viena. Relacionaba esta investigación con las revelaciones de Bernard Köhl, tercer clasificado del último Tour que ha sido sancionado por dos años por dar positivo en esa carrera por CERA y que esta semana anunció su retirada del ciclismo profesional. El líder de la prueba negó en la rueda de prensa tras la etapa que haya practicado dopaje. «Esta historia no me afecta y no tengo ningún problema de responder allá donde me convoquen». El Rabobank, por su parte, mostró su disposición a colaborar con la policía.
Su rival en el Giro, Danilo Di Luca, señaló tras ser ovacionado por su gente del Abruzzo que «no hay palabras para describir lo que he sentido en los ochenta kilómetros de la etapa. Nunca he visto tanta gente en tan poco espacio. Sólo espero que Denis ceda en las etapas que quedan, sobre todo en la subida de mañana al Vesubio, que es más dura que ésta y en ella espero distanciarlo».