Los trabajadores de Bilbobus -un colectivo que agrupa a unas 800 personas- secundaron ayer un paro de 24 horas para dejar sentado ante la empresa adjudicataria del servicio, Veolia Bilbao, y el Consistorio Bilbaino, que «no están dispuestos a aceptar que se recorten sus derechos», según declaró a GARA el presidente del comité de empresa, Pedro Angulo.

La protesta arrancó a las 8.00 de las cocheras de la empresa, en San Inazio, e incluyó concentraciones ante el edificio consistorial y las oficinas de la dirección, en la calle Epalza.

Los sindicatos denuncian «graves incumplimientos» por parte de la dirección en materia, entre otras cuestiones, de calendario laboral o nombramiento del servicio de traslado de personal y resaltan que se ha dado una «modificación sustancial de las condiciones de trabajo».

Critican asimismo deficiencias en cuanto a la limpieza de los vehículos o mantenimiento en general y señalan expresamente cuestiones como la falta de climatizadores en algunos autobuses «con lo que supone, con altas temperaturas, para la calidad del servicio y para las condiciones de riesgo del chófer que tiene que aguantar esta situación durante horas». «Nosotros tenemos que dar un servicio al ciudadano en condiciones dignas», plantearon.

Angulo subrayó al respecto que «no estamos pidiendo nada nuevo, sólo que se mantenga lo que ya teníamos, lo que hemos conseguido tras muchos años de esfuerzo» y rechazó la consideración de la empresa de «privilegios» en alusión a las reivindicaciones de los trabajadores. Opinó que la empresa «quiere cuadrar sus cuentas a base de los derechos de los trabajadores» y precisó que el comité esta dispuesto a revisar cuestiones pactadas antes de la adjudicación del servicio a esta empresa.

El comité valoró de forma positiva la movilización de ayer, ya que según explicó, el 100% de la plantilla secundó un paro, para el que el Lakua dictó servicios mínimos del 30%. Angulo indicó que la respuesta de los trabajadores a las movilizaciones debería suponer «un toque de atención» para Ayuntamiento y empresa, al tiempo que reiteró la petición de disculpas a los usuarios del servicio en nombre de los trabajadores.