Saski Baskonia anunciaba ayer para hacer oficial su primer refuerzo -el segundo, porque Darijo Saric también forma parte de la familia baskonista- de cara a la presente campaña: el ala-pívot israelí Lior Eliyahu.

Sin embargo, buena parte de la afición baskonista no ha visto con buenos ojos su llegada. Ayer en el Hikaateneo de Gasteiz, se presentaba la iniciativa de boicot al Maccabi, un manifiesto suscrito por el Comité de Solidaridad con Palestina, Hemen eta Munduan, LAB, ESK, CNT, Mugarik Gabe, Mundu Bat, Bidezko Bidean, Zuzen, Elkartzen, CVCristiana y Hala Bedi Irratia que pedía el «boicot a Israel y al fichaje de Eliyahu, ya que su presencia con los soldados en Gaza trasciende su papel deportivo».

A este respecto, relataban las reuniones con el gerente de Saski Baskonia, Jesús Vázquez, y pese a que éste les recordaba que Saski Baskonia es una institución deportiva sin implicaciones políticas, denunciaban que «por omisión, participa en la legitimación de Israel».

Además, anunciaban reuniones con la Diputación alavesa y el Ayuntamiento de Gasteiz para pulsar su opinión y exigir a Saski Baskonia un compromiso ético, en cuanto que subvencionan al club, amén de pedir a los socios que se den de baja.

Deportivamente, sin excusa

Deportivamente, el fichaje de Eliyahu no tiene excusa. El ala-pívot promedió en la pasada Euroliga 14 puntos, 6,6 rebotes y 2,4 asistencias en el Maccabi. Eliyahu firmaba con la entidad baskonista por tres temporadas.