La CE plantea medidas que palíen la crisis del sector agroalimentario
La Comisión Europea y la industria agroalimentaria han acordado una «hoja de ruta» con el objetivo de impulsar la competitividad de un sector que agrupa a 280.000 empresas y emplea a 4 millones de personas en la UE. La iniciativa incluye mecanismos para supervisar el mercado, concretamente para dar transparencia al modo en el que se fijan los precios y a los contratos comerciales en toda la cadena de suministro de alimentos.GARA |
La Comisión Europea acordó ayer con los actores de la industria agroalimentaria europea una «hoja de ruta» con la que impulsar la competitividad del sector y que incluye la creación de un mecanismo de supervisión del mercado y el objetivo de mejorar la transparencia en cuanto al modo en que son fijados los precios y contratos comerciales en toda la cadena de suministro de alimentos.
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario y comisario de Empresa e Industria, Günter Vergheugen; la comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel y la comisaria de Protección al Consumidor, Meglena Kuneva, se reunieron ayer con los principales actores de la industria para establecer los pasos a seguir tras las recomendaciones emitidas el pasado marzo por el grupo de alto nivel sobre la competitividad de la industria agroalimentaria.
Algunas de estas recomendaciones, como la de establecer un observatorio o la de constituir un foro europeo para discutir las relaciones entre los actores de la cadena agroalimentaria (productores, transformadores y distribuidores) han sido recogidas por la «hoja de ruta».
En una declaración conjunta, Vergheugen, Fischer Boel y Kuneva hicieron un llamamiento a la propia industria y a las autoridades de los estados para que faciliten la puesta en práctica de una serie de acciones con las que mejorar la competitividad del sector «en beneficio de los consumidores, las explotaciones agrícolas y la industria».
Las recomendaciones promovidas por Bruselas también ayudarán a «alentar el consumo de alimentos de alta calidad por parte de los ciudadanos europeos», añadieron. Mejorar la transparencia en el modo en que son fijados los precios y los acuerdos contractuales a lo largo de toda la cadena agroalimentaria es una de las prioridades contempladas en la «hoja de ruta».
Por otra arte, incluye un mecanismo de supervisión del mercado para evitar «fraudes», según informó la Comisión.
Otra de las propuestas es la de un foro europeo que aborde cómo mejorar las relaciones comerciales entre los actores implicados en esta industria y adoptar un «código de conducta» que sea aplicable en el conjunto de la UE. Además, propone un análisis de los puntos flacos y fuertes de la agroalimentación europea.
En lo que se refiere a las pequeñas y medianas empresas, se trabajará para simplificar los procedimientos administrativos para optar a programas de financiación de proyectos innovadores. También se realizará un estudio sobre el impacto de las marcas comerciales de distribuidores sobre la competitividad de la industria y se promoverán herramientas para este tipo de empresas.
La agroalimentación representa una de las industrias más importantes de la UE, con cerca de 280.000 empresas, de las que en torno al 90% son pymes. El sector emplea a cuatro millones de personas.
Representantes de comunidades autónomas pidieron ayer al Gobierno español que establezca medidas de apoyo político y financiero al sector lácteo para fomentar la recuperación en el precio en origen de la leche.
Expresaron su preocupación porque «en estos momentos la media que se paga en Europa es de 26 céntimos, algo relamente bajo que no cubre el coste». En respuesta a esta reclamación, el Ejecutivo de Madrid aseguró ayer que la UE ha prolongado las medidas de intervención tanto de mantequilla como de leche en polvo hasta el 31 de diciembre y explicó que ha enviado un plan a Bruselas para la promoción del consumo de leche, pendiente de aprobación. GARA