Campeón mundial de pretemporada. Florentino Pérez ya tiene un título mediático, y muestra todo su orgullo. El orgullo pay, el orgullo del rico comprador de cuerpos y voluntades. Su nuevo mariscal de la venta de camisetas, Ronaldo, Cristiano, también siente el orgullo pay. Se siente «orgulloso de ser el jugador más caro de la historia». La frase debe analizarse con mucha paciencia y estudiando todas las posibles significaciones. Vaciarla de circunstancias, presiones y guiones escritos de manera apresurada.

La cuestión es asimilar televisivamente el showcase comercial de la presentación del jugador portugués. Está claro que se llenó el Santiago Bernabéu porque estaba en el guión, que acudieron a la insistente llamada todo tipo de turistas y jóvenes de asueto, que la cifra probablemente se pueda colocar en algún récord, pero lo que me cuesta más asimilar es que sea noticia de apertura en algunas cadenas televisivas en su informativo de la tarde-noche. Hay que hacer mucho esfuerzo para encajar esta jerarquía sin sospechar. Probablemente fuera la noticia más positiva, pero que tenga más rango que la acusación contra Francisco Camps por cohecho, más que los cientos de muertos en los disturbios en al zona islamista de China, del golpe de Estado en Honduras, incluso que los sanfermines, es difícil de aceptar sin pensarlo más de un ratito.

Que cadenas como Veo, tan ligada al futurible jefe de la derecha española, es lógico, aunque levantaron toda su programación y estuvieron ofreciendo en directo toda la rueda de prensa posterior de Cristiano Ronaldo que duró más de hora y media frente a cerca de doscientos periodistas. Lo magnífico es que este fornido muchacho debe ser un virguero con el balón, hasta su cuerpo puede despertar pasiones y fantasías, pero no tiene masa encefálica suficiente para aguantar hora y media de preguntas y respuestas. No es Pedro Ruiz, ni mucho menos. Y como ya se estrenó con imaginación inusitada asegurando que «cumplo mi sueño de niño», el resto fue nada con sonrisas. Lo que no se entiende es que TVE entre al mismo trapo. Y una curiosidad, ese espacio desierto que se llama La Sexta Deportes logró la mejor audiencia. Cosas del orgullo pay.