Juicio a tres miembros de la asociación 3 de marzo
La Fiscalía mantiene la petición de penas de prisión para los imputados
La Fiscalía mantiene las peticiones de prisión aun habiendo profundas contradicciones entre los testimonios actuales y los atestados, y entre los diferentes policías que fueron citados. Los abogados defensores pidieron la absolución, y concluyeron que las víctimas eran los imputados por haber recibido brutales agresiones, respaldadas con sendos informes médicos.
Iñaki SALABERRI | GASTEIZ
Ayer se celebró el juicio contra los miembros de la Asociación de Víctimas del 3 de Marzo -Andoni Txasko, Josu Ormaetxea y Aitor Fernández de Ortega- que en el homenaje anual de 2006 fueron arrestados y acusados de «enaltecimiento del terrorismo» por portar las fotos de Igor Angulo y Roberto Saiz, presos fallecidos días antes en prisión. Más tarde, fue la propia Audiencia Nacional española quien los absolvió, pero finalmente, siempre teniendo en cuenta los atestados policiales, fueron encausados por supuestos atentados contra la autoridad, desórdenes públicos, resistencia a la autoridad y lesiones: así, la Fiscalía mantuvo ayer sus peticiones de prisión de entre 18 y 30 meses contra los acusados, así como una multa económica.
El juicio estuvo precedido de una marcha en apoyo a los tres procesados, los cuales recibieron el apoyo de varios testigos presenciales, entre los que destacan periodistas, una realizadora de cine de Mediapro (la cual aportó una prueba de audio y vídeo en la que se observa cómo se realizó la carga), delegados de LAB y un representante de UGT. Todos ellos declararon, en calidad de testigos, que la actuación policial fue sin previo aviso y excesiva. Asimismo, los abogados reiteraron que Andoni Txasko no pudo agredir a nadie por su invalidez, fruto de los trágicos sucesos acaecidos el 3 de marzo de 1976.
Pese a ello, la Fiscalía consideró de gran importancia probar el hecho de que la Policía autonómica le advirtió personalmente para que fuera retirada la ikurriña y, posteriormente, mediante la megafonía, pero ningún testigo confirmó ese extremo; de hecho, en la prueba de audio y vídeo no se escucha la supuesta advertencia policial.
Las contradicciones
Fueron siete los policías que declararon, entre ellos el responsable del operativo, y aun así no fueron capaces de determinar cuál fue el número aproximado de agentes que procedieron a realizar la carga y detención de Andoni Txasko y Josu Ormaetxea, variando el testimonio desde uno a ocho por detenido.
Tampoco fueron lo suficientemente coherentes como para explicar qué agente fue supuestamente agredido por Aitor Fernández de Ortega, puesto que el atestado y la acusación del Ministerio público difieren. Hubo un policía que incluso no pudo determinar el momento de la detención de Txasko en el vídeo, cuando el resto de los asistentes sí lo hizo, con el consiguiente asombro del propio magistrado.
La conclusión
Los abogados defensores reiteraron en la inocencia de sus defendidos, explicando las contradicciones entre los diferentes policías y los atestados, haciendo hincapié en el hecho de que la actuación de la Ertzaintza fue un acto político basado en un supuesto delito que la AN archivó, y explicando, con las propias imágenes y los informes médicos de las dos partes, quiénes fueron los agredidos.
Una testigo preguntó por qué ese día les acompañó la Policía autonómica cuando siempre han sido dirigidas sus marchas por la Policía Municipal y nunca han tenido problemas.
Varios testigos de la defensa afirmaron que los únicos agresores fueron los agentes de la Ertzaintza, mientras que los policías que testificaron no lograban estar de acuerdo.