Casi toda la población de Mogadiscio norte huye ante el aumento de los combates
GARA |
La intensificación del conflicto en la capital somalí, Mogadiscio, está teniendo un impacto devastador en la población de la ciudad, y está causando un sufrimiento enorme y un desplazamiento masivo, según denunciaron el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y Médicos Sin Fronteras (MSF).
La ofensiva de ocho semanas liderada por al-Shebab y la milicia de Hizbul al-Islam contra el Gobierno y el recrudecimiento de los combates en Mogadiscio ha provocado la huida de sus hogares de la mayoría de los habitantes de los distritos de Yaqshid, Karan y Abdul Azziz, en el norte de la ciudad, unas 204.000 personas, lo que convierte a esta situación en el mayor éxodo de la capital somalí desde la intervención de Etiopía en 2007. «Estas zonas han sido consideradas hasta ahora como remansos de paz, y han escapado a gran parte del conflicto y de la destrucción», indicó ACNUR.
Los bombardeos, las explosiones y la lucha abierta entre los distintos grupos ha sumido a la ciudad en el caos, según MSF.
Durante la última semana, los tres centros de salud y el hospital pediátrico que gestiona MSF en Mogadiscio Norte han tenido que cerrar sus puertas. El personal de la organización, al igual que el resto de la población, ha tenido que huir, algo que no había sucedido en los más de 17 años que MSF lleva trabajando en Mogadiscio.
«Todo el mundo está aterrorizado y en los últimos 15 días el número de víctimas mortales y heridos ha aumentado drástica- mente. Resulta imposible poder prestar asistencia médica y humanitaria a aquellos que la necesitan», dice desde Nairobi Mónica Camacho, coordinadora de MSF en Somalia.
De acuerdo con los residentes locales de la ONU, sólo el enfrentamiento de la semana pasada ha terminado con la vida de cerca de 105 personas y ha herido a 385 más.
Muchos de los desplazados huyen a la localidad costera de Kismayo y al corredor de Afgooye, a unos 30 kilómetros al oeste de Mogadiscio y que ya alberga a 400.000 víctimas de conflictos anteriores viviendo en refugios temporales hechos con palos y telas de plástico y donde el acceso a la salud es enormemente limitado y la falta de agua potable y de comida hace que la situación sea desesperada. Pero la mayoría se dirige ahora a lugares tan distantes como las regiones del bajo y medio Shabelle, Galgaduud y Juba. El número de desplazados internos en Somalia ya supera los 1,2 millones.