El líder norcoreano, Kim Jong Il, continuó ayer con una apretada agenda que le llevará en los próximos días a hacer varias visitas por el país, un día después de que una televisión surcoreana asegurara que su estado de salud se había deteriorado debido a un cáncer de páncreas.

Cada vez que surgen rumores sobre la salud de Kim, los medios estatales muestran imágenes del dirigente visitando fábricas, granjas y bases militares.

Según los expertos, estos viajes también pretenden ayudar a mantener el apoyo interno hacia Kim, de 67 años. Además, la intención sería mostrarle más cercano a la gente y en lugar de situarle como un gran líder en grandes actos de Estado, se prodiga en fotografías en actos más cercanos.