La plataforma Térmicas No Miranda-Lantarón ha presentado un escrito de alegaciones sobre la solicitud de autorización administrativa, declaración de utilidad pública y de Impacto Ambiental del gaseoducto denominado `Ramal de suministro a la CTCC de Lantarón'.

En primer lugar, el documento recoge que, «en lugar de realizar un estudio de impacto ambiental en todo su conjunto, se presenta en tres fases, desvirtuando el sentido del estudio». Por eso, entienden que se está llevando a cabo una política de «hechos consumados que resulta inadmisible» con la posible aprobación de un gaseoducto para una central que quizás no llegue a construirse.

Impactos significativos

El gaseoducto de abastecimiento generaría «impactos ambientales significativos» como queda inscrito en las alegaciones. Por una parte, se produciría la «segmentación y fragmentación» del territorio -se crearía una barrera de 19 kilómetros paralela a la cuenca del Ebro, provocada por la suma del gaseoducto más la línea de alta tensión- indica el documento.

Por otro lado, desde la plataforma contraría a la central de ciclo combinado, alegan que el ramal de suministro «no cuenta con criterios, objetivos e indicadores específicos» para una planificación obligatoria. Asimismo, aclaran que el único fin es suministrar gas a la central térmica en proyecto, y lo «único que generaría son beneficios para sus promotores».

Por último, recuerdan que el número de válvulas de seccionamiento son «insuficientes por motivos de seguridad». Estas válvulas requieren un coste de instalación y personal que, a juicio de la plataforma, «los promotores quieren ahorrar a costa de la seguridad del entorno».