Un extraño en nuestro hogar
Iratxe FRESNEDA
Periodista y profesora de Comunicación Audiovisual
Para muchas personas, su casa es como un templo, es ahí donde se refugian del exterior y se sienten cobijados. Por esa misma razón, les resulta poco apetecible que un desconocido entre en su hogar. El ser humano suele temer a lo nuevo, a lo desconocido, a aquello que escapa de su control. De ahí que las películas de terror basen sus argumentos precisamente en esta fobia. Que alguien forme parte de nuestra vida más íntima, que comparta nuestros despertares, riñas familiares etc. no suele ser demasiado fácil de asimilar. Una niñera, de aspecto frágil y dulce, puede convertirse en el mayor enemigo de una pareja, la seductora novedad puede romper hasta los lazos que creemos más sólidos. Ese es al menos el argumento de «La mano que mece la cuna» de Curtis Hanson («L.A.Confidential»). Rebeca de Mornay se acerca al estereotipo de mujer seductora y perversa, que desestabiliza el hogar donde ejerce de canguro poniendo en riesgo la familia.
Otro ejemplo cinematográfico que recurre a la intromisión de extraños en nuestro hogar es «Mujer blanca, soltera busca», de Barbet Schroeder. El filme lleva al límite los riesgos que puede entrañar compartir piso con una desconocida con la que hemos contactado mediante un anuncio. «Los otros» dentro de nuestros hogares suelen ser el detonante que abre la caja de nuestros temores más ocultos. Tanto es así que el cine no ha dejado, ni dejará, de retratar una y otra vez, con formas distintas, la misma historia. Lo último filmado sobre este asunto es la nueva película de terror producida por Warner Bros y firmada por el realizador catalán afincado en Hollywood Jaume Collet-Serra («La casa de cera»).
La película cuenta la historia de una pareja que, tras perder al bebé que esperaba, decide adoptar a una niña. La sorpresa la reciben en casa, cuando (como siempre) empiezan a suceder cosas extrañas. El punto de partida de la historia no ha gustado nada a más de una decena de asociaciones en favor de la adopción en EEUU.
El trailer ha creado además una considerable polémica entre los miembros de asociaciones tan conocidas en Estados Unidos como Equality for Adopted Children, que están preocupados por que películas como esta perpetúen el mito de que los niños adoptados no se integran en las familias de acogida. De momento, la Warner ha decidido eliminar una de las escenas del trailer inicial en la que la niña protagonista decía «Es difícil querer a un niño adoptado tanto como a uno propio». Sutilezas de Hollywood.