Los escándalos por corrupción en el PP no parece afectar a la intención de voto
Coincidencia o no, ayer presentaba su dimisión Luis Bárcenas, tesorero del Partido Popular procesado por el Tribunal Supremo bajo la acusación de participar en una trama de corrupción, el mismo día en el que se hacían públicos los datos del último barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas español). Según este estudio, el partido que preside Mariano Rajoy se sitúa por primera vez en cinco años por encima del PSOE, dejando ver con claridad que el peso de la crisis en las intenciones de voto de los ciudadanos del Estado español está muy por encima de los escándalos de corrupción como el que ha llevado a la dimisión de Bárcenas, y en el que se han visto involucrados otros altos cargos del partido conservador.
No deja de extrañar que la opinión pública española esté dispuesta a pasar por alto las andanzas de políticos sobre los que pesan fundadas sospechas de falta de honestidad a la hora de gestionar instituciones y bienes públicos, precisamente en una coyuntura en la que tan escasos y necesarios son esos recursos para paliar una crisis que obliga asomarse a la pobreza a una buena parte de la sociedad. Cosas del bipartidismo, de la sarten y el cazo.