El diálogo social promovido por el Gobierno de Lakua se ha saldado, por el momento, con el incremento en 200 euros de las ayudas a los trabajadores que estén afectados por Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) y participen en actividades de carácter formativo durante el tiempo en que duren sus respectivos expedientes. Hasta ahora el límte estaba fijado en 600 euros, y ha sido incrementado hasta los 800.

Representantes del Ejecutivo, encabezados por la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, de los sindicatos CCOO y UGT y de Confebask, mantuvieron ayer una reunión para cerrar los primeros acuerdos de la Mesa de Diálogo Social. Al término del encuentro, comparecieron ante los medios para dar cuenta de lo acordado. La propia Zabaleta, secundada por los secretarios generales de UGT y CCOO, Dámaso Casado y Unai Sordo, respectivamente, y su homólogo de la asociación empresarial, José Guillermo Zubia, fue la encargada de dar las pertinentes explicaciones.

La rueda de prensa comenzó con cerca de una hora de retraso respecto a la hora anunciada, aunque, ante las especulaciones por la tardanza, la consejera rechazó que se debiera a la existencia de desavenencias entre las partes o a la introducción de propuestas de última hora en la negociación. Zabaleta admitió, eso sí, que habían «apurado al máximo» en la redacción.

La Mesa de Diálogo Social, en la que no participan ELA y LAB por considerarla baldía, es una de las principales apuestas de Patxi López en este inicio de legislatura, marcado por la crisis económica y sus consecuencias, y una de las metas que se habían marcado los participantes era ofrecer algún resultado lo antes posible. A este respecto, la titular del Departamento de Empleo y Asuntos Sociales admitió su objetivo de «lanzar un mensaje optimista y decirle a la sociedad que la mesa de diálogo social funciona, que todas las partes están comprometidas».

Sin «grandes expectativas»

Zabaleta, en su intervención, negó que los primeros acuerdos alcanzados puedan haber defraudado las expectativas creadas en algunos ámbitos sobre la interlocución abierta entre Gobierno, patronal, CCOO y UGT, y aseguró que las medidas adoptadas no son «baladí». «No sé qué expectativas pueden haberse generado en torno a la mesa de diálogo social, nosotros nunca hemos tratado de generar grandes expectativas sobre la misma, porque conocemos el ámbito de nuestras competencias», declaró al respecto la consejera.

A su juicio, la interlocución emprendida por el Ejecutivo autonómico con estos agentes constituye «una apuesta de gran alcance» que continuará en los próximos meses.

Dicho esto, Zabaleta dio más detalles del acuerdo ayer suscrito, y explicó que han decidido flexibilizar las condiciones para acceder a las ayudas a la formación por parte de los trabajadores afectados por EREs, que en estos momentos alcanzan los 42.000 en la CAV.

La decisión, afirmó, se ha adoptado ante el escaso número de personas que se han acogido hasta ahora a las subvenciones, apenas 394, de forma que de los 15 millones de euros de gasto previsto por el anterior Ejecutivo por este motivo sólo se han ejecutado 400.000.

Ahora, tras flexibilizar las condiciones e incrementar la cuantía de las ayudas, esperan que el número de trabajadores que las soliciten sea mayor, y en el caso de que sea necesario, la partida económica del programa se verá también aumentada.

En la nueva convocatoria de ayudas se cambiará el método de cálculo de la subvención, que pasará a pagarse en función de las horas, independientemente del número de días en los que se realice el curso de formación.

Asimismo, a partir de ahora los trabajadores afectados por un expediente pueden acceder a la ayuda aunque su empresa no opte por acogerse al programa.

Empresas y trabajadores dispondrán de plazo hasta el 30 de diciembre para presentar sus solicitudes.

Lakua, patronal, CCOO y UGT también han acordado reforzar las medidas para incrementar la seguridad laboral, especialmente en el ámbito de la construcción, y establecer una serie de prioridades para éste y el próximo año dentro del Plan estratégico de seguridad y salud laboral 2007-2010.

El espejo de Madrid

Por otra parte, preguntados por la ruptura del diálogo social en Madrid, los representantes de Confebask, CCOO y UGT no quisieron polemizar ni profundizar en los motivos de la misma y sólo aludieron al tema para dar valor al acuerdo alcanzado en su marco de actuación.