Treinta de julio y el Young Boys como rival. Ni siquiera suena a ensayo general, sino a uno de esos bolos sin trascendencia con los que los equipos empiezan a estirar las piernas a coger ritmo e interiorizar conceptos.

Pero a los jugadores no les toca hoy demostrar que pueden tener hueco, ni al entrenador hacer pruebas para cuando llegue la temporada. Porque la temporada ya esta aquí. Ni la fecha ni la escasa entidad del rival ocultan que el Athletic se juega hoy buena parte de su futuro europeo. Si los rojiblancos quieren estar en la verdadera Europa League, la que comienza en setiembre con la fase de grupos, no pueden permitirse el más mínimo tropiezo. Como subrayaba Joseba Etxeberria el lunes, las balas son de verdad desde el principio. Y sólo hay una oportunidad para hacer diana.

Por eso desde el equipo se viene insistiendo en las últimas semanas del peligro que encierra esta eliminatoria. Hay que evitar despistes, así que cuando no se habla del mayor rodaje de los suizos -han disputado ya tres jornadas de su Liga, en la que son líderes-, se menciona el campo de hierba artificial en el que se disputará el choque de vuelta, destacando así la trascendencia de la cita de San Mamés. O se citan experiencias previas de ingrato recuerdo. La última, sin ir más lejos, cuando el Athletic cayó en la Intertoto a las primeras de cambio ante el teóricamente aún más asequible Ecomax.

La mejor muestra de las nulas concesiones que pretenden realizar los roijblancos pasa por los planes de Joaquín Caparrós, que esta noche alineará a sus hombres de máxima confianza. Incluso Javi Martínez, que hace apenas un par de semanas pasaba por el quirófano, jugará de inicio en un equipo en el que la única incógnita reside en el lateral zurdo, por el que pugnan Koikili y Xabi Castillo. Si el elegido es finalmente el vizcaino, que parece haber tomado ventaja en los últimos días, el once será el mismo -exceptuando la entrada de Susaeta por David López- que disputó la final de Copa. No hay dudas, por tanto, sobre la manera en que se afronta el encuentro.

Vladimir Petkovic también confiará esta noche en los hombres que han llevado al Young Boys al primer puesto de la liga helvética. Con tres centrales y dos laterales con recorrido -algo que en Bilbo confían en poder aprovechar a la contra-, la responsabilidad ofensiva recaerá en Doumbia -máximo realizador del equipo gualdinegro, con cuatro goles en las tres primeras jornadas de Liga-, Marco Schneuwly y Regazzoni.