Atentado de ETA en Burgos
La izquierda abertzale insta a abrir cauces de diálogo político sin exclusiones
GARA | DONOSTIA
La izquierda abertzale hizo pública su valoración del atentado de Burgos a través de una nota de prensa en la que, entre otras reflexiones, expuso su rechazo a la idea de que el Estado español pueda derrotar policialmente a ETA y expresó su voluntad de contribuir a crear un escenario que «traslade la confrontación con el Estado a parámetros de confrontación democrática».
De entrada, en el texto se indicaba que «una vez más estos hechos demuestran la absoluta irresponsabilidad de aquellos sectores políticos y mediáticos que siguen insistiendo en la posibilidad de derrotar policialmente a ETA», reiterando que «el conflicto político que enfrenta al pueblo vasco con el Estado no tiene solución desde la lógica de derrota policial o militar de ETA».
«Los largos años transcurridos desde sus orígenes, el sufrimiento acumulado por todas las partes... obliga, desde la responsabilidad política, a extraer una conclusión clara: la derrota policial de ETA es sencillamente una quimera. La única solución posible -proseguía-pasa por dar una respuesta democrática al núcleo del conflicto, que no es otro que la existencia en Euskal Herria de una mayoría popular que reclama la posibilidad de que ésta pueda decidir libremente su futuro».
La izquierda abertzale recordó que ETA «nunca ha planteado la solución al conflicto en términos de victoria militar», sino que, al contrario, «siempre ha manifestado con absoluta claridad su apuesta inquebrantable por una solución negociada, situando además el protagonismo de la misma en las fuerzas políticas, sociales y sindicales de Euskal Herria».
Dinámicas contrapuestas
A su entender, «la actual dinámica de represión y respuesta a la que el Estado español quiere condenar al pueblo vasco, e incluso a la propia sociedad española, ha de dar paso a una dinámica de diálogo, negociación y acuerdo que dé solución acordada a las raíces del conflicto político». Y, para ello, considera «exigible al conjunto de la clase política y al conjunto de fuerzas políticas, sociales y sindicales un acto de responsabilidad política, un esfuerzo suplementario en esa dirección. No podemos ni debemos mantenernos como meros espectadores de esta situación».
Asumió también que «quienes aspiramos a construir un escenario democrático para Euskal Herria debemos ser agentes activos en la construcción de una estrategia eficaz que contribuya al logro de dicho objetivo» y, por tanto, «el reto» es crear «un escenario que haga posible la materialización de todos los proyectos políticos sin límites ni exclusión alguna y que traslade la confrontación con el Estado a parámetros de confrontación democrática».
Y aseguró que «la izquierda abertzale quiere volver a subrayar su disposición absoluta para abrir los cauces de relación y diálogo políticos necesarios con todos los agentes políticos, sociales y sindicales, sin exclusión alguna, para alcanzar dicho objetivo».