Maite SOROA
Tres propuestas de César
Las últimas acciones de ETA en Burgos y Palma de Mallorca han despertado de su letargo a las decenas de columnistas que en los últimos tiempos festejaban la derrota final del independentismo vasco y empapaban sus artículos con el cloroformo de un «cambio» político que, aunque traten de ocultarlo, sólo es fruto de un fraude electoral escandaloso.
De entre los cientos de artículos publicados ayer, me quedo con el de César Alonso de los Ríos, en «Abc» que, desorientado ante la cruda realidad, se empeñaba en dar instrucciones para que la realidad termine por parecerse a sus artículos.
Según De los Ríos, «siendo la lucha contra ETA un objetivo prioritario del gobierno central, es claro que al gobierno que preside Patxi López le corresponde toda una política referida a cuestiones defendidas hasta la fecha por los nacionalistas y por la izquierda abertzale (etarra)». Ya ven que la cosa se extiende más allá de ETA.
Ahora empieza con las instrucciones a López: «En primer lugar, debería comenzar a hacer el desmontaje del sistema educativo que ha permitido formar en las últimas tres décadas a un par de generaciones de vascos en el odio contra España y en la manipulación de la Historia (...) es evidente que una de las causas del terrorismo y el independentismo está en la educación. La expulsión del castellano tuvo como fin, desde el primer momento, el reconocimiento de la comunidad euskaldún y, al tiempo, unos contenidos educativos congruentes con ello». O sea, que de lo que se trata es de negar reconocimiento a la comunidad euskaldun. Bien está saber sus planes.
A la majadería anterior le sigue otra: «En segundo lugar, debería tener que ver con el debate sobre los homenajes a etarras. El hecho de que estos deban pasar por la luz verde de los jueces es un inmenso disparate. Quiero decir que, en todo caso, las decisiones de los jueces no deberían escapar a los debates normales». No vaya a ser que los jueces se pongan en plan garantista...
Y para concluir: «Los socialistas deberían ocuparse de la presencia de ANV en las instituciones». En román paladino, quiere decir algo así como aplicar la «solución final» de los nazis contra los judíos. Habla claro este tío. A César, lo que es de César.