El Torneo de la Blanca de Gasteiz le ofrecerá esta tarde a Aimar Olaizola una nueva oportunidad de arrebatarle el trono manomanista a Juan Martínez de Irujo, el actual campeón de la competición reina, gracias al partido de revancha que disputarán esta tarde en el Ogeta (segundo partido de un festival que comienza a las 17.45, Tele-5).

Últimamente es muy habitual ver una final en la que se encuentran estos dos pelotaris navarros, ya sea mano a mano o por parejas. Pero lo cierto es que cada pelotari lleva un verano muy diferente en cuanto a encuentros.

Mientras que Aimar está disputando prácticamente dos o tres partidos a la semana, Juan no tiene tiempo ni de descansar entre un choque y otro. Además, ha cambiado de modalidad para jugar en trinquete, en el Máster de Biarritz, junto a Sorhuet -vencieron 40-36 en la final a Xala y Harizmendi-.

El de Ibero está siendo uno de los pelotaris más solicitados para los festivales veraniegos, y ese cansancio acumulado le puede pasar factura esta tarde. A pesar de ello, el delantero de Aspe siempre saca fuerzas de donde no las hay, y más si su rival es Olaizola II que, aunque se sientan mutuo respeto, al fin y al cabo son máximos enemigos.

Este partido de revancha se disputará después de otro encuentro donde la venganza también tiene un papel muy importante. Y es que Iker Arretxe y Mikel Beroiz se verán las caras en la final del torneo Promoción mano a mano. El zaguero de Uharte es el actual campeón Manomanista de Segunda, después de dejar en el camino, precisamente, a Iker en cuartos de final (22-18).

Los dos pelotaris navarros llegan en un buen momento de forma y de juego tras lo visto en los partidos de semifinales. Arretxe II dejó fuera de la competición a Urrutikoetxea (22-13) y Beroiz tuvo que apretar los dientes ante un peleón Retegi Bi (22-18).

Xala y Goñi III, a la final

En cuanto al torneo de parejas, la noche del jueves dejó un dúo finalista, el formado por Xala y Goñi III. La dupla de Aspe venció por un contundente 22-9 a Bengoetxea VI y Begino.

Lo que en los primeros compases del partido parecía un encuentro de máxima igualdad, el oficio de los colorados desarboló todos los pronósticos. Hasta el empate a cinco las fuerzas estuvieron muy igualadas, haciendo el partido muy duro y peleado. Pero la falta de juego de Oinatz tras la lesión del dedo anular de su mano izquierda y un errático Begino, permitieron a Yves y Fernando apretar el acelerador y alcanzar el cartón 22.