Los rojiblancos, en Europa
El Tromsoe, otro rival con trampa para el último peldaño
El Athletic se enfrentará a los noruegos en la última eliminatoria previa a la Europa League. Como sucediera en la ronda anterior, el equipo rival llega más rodado y con la baza a favor de su estadio, de hierba artificial y donde se disputará el encuentro de vuelta.
Amaia U. LASAGABASTER
Sólo la alegría, todavía patente, por la clasificación lograda la víspera evitó que más de uno pensase en el Día de la Marmota. Lo cierto es que la segunda eliminatoria a la que debe hacer frente el Athletic para participar de forma definitiva en la Europa League arranca con muchas similitudes a la anterior.
Los rojiblancos se enfrentarán en esta ocasión al Tromsoe. Un equipo que llega a la cita incluso más rodado que el Young Boys y que, como el suizo, también parte con dos bazas a su favor: el encuentro de vuelta se disputará en Noruega y será sobre hierba artificial.
Al Athletic, además, se le acumulará el trabajo en esas fechas, no en vano disputará cuatro partidos en doce días: los dos choques de la final de Supercopa frente al Barcelona -16 y 23 de agosto- y su doble duelo con el Tromsoe -20 y 27-.
Dos circunstancias diferencian esta ronda. El Athletic llegará a la misma más preparado y en las reacciones iniciales tras conocerse el resultado del sorteo la hierba artificial apenas ha salido a relucir. La desagradable sorpresa protagonizada por el Young Boys en San Mamés ha provocado que el interés se lo lleve en esta ocasión el rival.
Ni siquiera al hecho de que los rojiblancos vuelvan a disputar la vuelta lejos de casa se le concede excesiva importancia. «No es influyente -asegura Caparrós-, tal y como se ha visto frente al Young Boys o la temporada pasada en la eliminatoria de Copa ante el Sporting».
Bastante más importa un Tromsoe que llega a la cita «bastante rodado, es el más rodado de los equipos que nos podía tocar». Y es que la latitud -Tromsoe se encuentra a 300 kilómetros del círculo polar ártico- y los duros inviernos provocan que la Liga noruega arranque en marzo, con lo que a estas alturas ya se han disputado 19 jornadas, más de la mitad del campeonato. Aún así, Caparrós no quiere excusas. «Nuestro equipo va cogiendo poco a poco el ritmo de la competición y afrontamos la eliminatoria con ilusión, como la que acabamos de disputar».
Mejor en Europa
El Tromsoe ha accedido a la competición continental tras concluir la pasada Liga en la tercera posición. Peor le van las cosas en la actualidad, en la zona media de la tabla y con sólo cinco puntos de colchón sobre el descenso. El equipo noruego -en cuyas vitrinas apenas aparecen las Copas de 1986 y 1996-, está ofreciendo su mejor cara en esta previa de la Europa League, en la que ya ha eliminado al Dinamo de Minsk y el Slave Koprivinca croata.
Entrenado por Per Mattias Hogmo, en su plantilla destacan la presencia del central Tore Reginiussen, del capitán de la selección noruega sub-21 Ruben Jenssen o, sobre todo, de Sigurd Rushfeldt. El delantero de 36 años -máximo realizador del equipo, con 15 goles en lo que va de temporada- es toda una institución en el club lapón, en el que comenzó su carrera y al que regresó hace tres años, tras militar Birmingham, Racing de Santander, Rosenborg y Austria de Viena.
Dos equipos, estos últimos, con los que curiosamente se enfrentó al Athletic en las dos últimas participaciones del equipo rojiblanco en competición europea. Y en ambos casos -la Champions League con los noruegos y la Copa de la UEFA con los austriacos- el saldo fue negativo para el Athletic.
«Es evidente que guardo un buen recuerdo de ellos -aseguraba Rushfeldt tras conocer el resultado del sorteo-, aunque es un equipo diferente al que yo conocí». En opinión del delantero, «esta eliminatoria va a ser muchísimo más complicada que las anteriores, pero no es imposible. Ellos son los favoritos, pero contamos con dos ventajas, que ellos todavía no han empezado a jugar la Liga y que la vuelta se disputa aquí».
Tres focos centraron la atención del Athletic a su regreso de Berna: el sortero realizado en Nyon, lo sucedido en el Stade de Suisse y la situación de Markel Susaeta.
El eibarrés estaba siendo el jugador más destacado del partido cuando, en el minuto 70, fue sustituido tras sufrir la enésima falta. El jugador se dolía considerablemente del hombro, pero las pruebas realizadas ayer descartaron que sufra fractura alguna, lo que le habría supuesto varias semanas de baja. El diagnóstico se ha quedado en una «contusión acromio-clavicular en el hombro derecho».
En lo que respecta a las valoraciones sobre el choque frente al Young Boys, los rojiblancos reconocieron haber pasado «un mal rato tras el 1-2. Nos hicieron sufrir hasta el final», aseguró Óscar de Marcos, que se mostró «orgulloso» por haber podido debutar con el Athletic.
También debutó, en este caso como goleador, Iker Muniain, del que sus compañeros destacaron su «capacidad», aunque abogaron por la calma «porque todavía es muy joven, así que no vamos a correr demasiado -aseguró Iraola-. Aunque ya es un jugador muy bueno», reconoció el lateral. A.U.L.
En la plantilla del Tromsoe destaca la presencia del capitán de la selección noruega sub-21 Ruben Jenssen y, sobre todo, de Sigurd Rushfeldt. El veterano delantero ya se ha cruzado en el camino europeo del Athletic, defendiendo las camisetas de Rosenborg y Austria de Viena.
El Athletic volverá a disputar el choque de vuelta sobre hierba artificial. El Tromsoe juega sus partidos en el Alfheim Stadion, con capacidad para 7.500 espectadores.