La encrucijada del sector ganadero vasco
El dudoso futuro del matadero de Zorrotza -que se encuentra en concurso de acreedores-, la venta de Iparlat-Kaiku, junto a la práctica desaparición de la patata y la remolacha de Araba son fieles indicadores de la ineficacia de la política agraria llevada a cabo durante dos décadas por el anterior Gobierno de Gasteiz y las diputaciones controladas por el PNV. El modelo defendido por los jelkides, aun con la permanente oposición de representantes del sector como EHNE, apunta a un futuro marcado por la incertidumbre y sobre el que planea el fantasma de la desaparición.
La situación del matadero bilbaino de Zorrotza es el paradigma del fracaso de las directrices apadrinadas por el PNV. Mientras una amplia mayoría de ganaderos apostó siempre por la práctica tradicional de venta a las carnicerías, desde 2004 Lakua empujó al sector a la centralización sosteniendo exclusivamente el matadero de Zorrotza, gestionado por Gurokela, y haciendo desaparecer los mataderos comarcales para enfocar una venta dirigida a las grandes superficies. Apenas cinco años después, Zorrotza se hunde, mientras el regreso a la fórmula descentralizada de venta a carnicerías abanderada por Erralde en el matadero de Durango responde con energía a las expectativas.
Algo similar ha ocurrido con Iparlat-Kaiku. Tras su venta al grupo suizo Emi, y en un contexto de asfixia de los pequeños productores de leche que se debaten entre la producción por debajo del coste o el abandono de las explotaciones, desde Kaiku Corporación se hace un llamamiento a rebajar aún más los precios. Hoy por hoy en Euskal Herria es imposible adecuar los costes de producción a precios de venta al público de 59 céntimos el litro, si no es importando leche en polvo a 15 céntimos. Pero ¿es ésa la leche que quiere el consumidor vasco? Desde luego, no es la que quieren los productores. Y es a esos productores a quienes tendrá que escuchar en adelante el Gobierno de Lakua si realmente pretende revertir la delicada situación que atraviesa el sector.