El portavoz parlamentario de Nafarroa Bai y presidente de EA en Nafarroa, Maiorga Ramirez, instó ayer a la presidenta de UPN, Yolanda Barcina, a «aclarar» antes del inicio del nuevo curso político la situación de los ediles que a lo largo del verano han dimitido de las filas del partido «para evitar que la labor municipal se vea empañada por la indefinición».

En concreto, el portavoz de NaBai se refirió a los casos de las tres ediles de UPN en el Ayuntamiento de Lizarra que decidieron dimitir tras la celebración de las fiestas patronales por «desencuentros» con la actual alcaldesa, Begoña Ganuza, o el caso protagonizado por la concejala en Iruñea Cristina Sanz, quien en el mes de junio anunció su paso a las filas del PP. «Por el bien del funcionamiento institucional, UPN debería aclarar cuanto antes la situación de los grupos municipales en los ayuntamientos donde se han producido bajas o cambios de siglas, especialmente donde puede afectar a la acción de gobierno, como Pamplona o Estella», afirmó.

Desviar la atención

El presidente de EA en Nafarroa consideró una «contradicción» que un partido como UPN, «que apela constantemente a la estabilidad institucional para justificar su entente con el PSN en Navarra», muestre a través de su presidenta «semejante indecisión a la hora de garantizar la estabilidad y la normalidad en el ámbito municipal».

Ramirez criticó además la «polémica estéril» creada en días pasados en torno al posicionamiento de NaBai ante las declaraciones de condena de los atentados de ETA, una polémica que a su juicio «ha sido alimentada de forma intencionada» por Barcina para «desviar la atención política y ciudadana en una estrategia de ocultación de datos muy relevantes sobre la situación económica».

En esa línea, censuró que UPN no haya dado a conocer todavía los últimos datos fiscales.